Ana Lilia Pacheco

NVI Noticias - 07/05/2023 - 09:05

A través de la terapia ocupacional, actualmente 50 jóvenes y adultos oaxaqueños están saliendo del alcoholismo y drogadicción, gracias a la asociación civil Reto a la Esperanza.

Javier González, encargado de la asociación, comparte que esta agrupación nació en España en 1986, pero fue hasta 1994 cuando llegó a México y Oaxaca, debido a la necesidad de tener este tipo de espacios para apoyar a las personas a cambiar su vida y dejar atrás las drogas legales e ilegales.

Con talleres ocupacionales como herrería, pintura, tapicería, además de formarles en la religión cristiana, la asociación ha apoyado a miles de hombres y mujeres a no sólo salir de su adicción, sino reintegrarse en la sociedad y tener un empleo.

Actualmente, la asociación está en los municipios de Asunción Nochixtlán y Oaxaca de Juárez, en Oaxaca; Puebla, Morelos, Estado de México, San Luis Potosí, Jalisco y Veracruz, lugares a los que han llegado debido a la demanda de su apoyo.

"El alcoholismo afecta a todas las edades. Es una droga que se puede comprar en cualquier lugar; es algo que se ve natural, pero se convierte en un problema con los años", aseguró.

Talleres, donaciones y ventas

El encargado de Reto a la Esperanza comparte que la asociación se sostiene de los productos que crean en los talleres ocupacionales, además de la donación de muebles, línea blanca y otros productos que ellos componen y revenden.

Además de que recibe donaciones que pueden ser deducibles de impuestos, por lo que invita a la ciudadanía a apoyar esta asociación y sobre todo a quienes quieren salir de las adicciones, pero no encuentran un lugar que los acoja sin pagos.

Explica que durante ocho meses, tiempo que están en promedio en esta casa, las y los jóvenes y adultos reciben capacitación, están un mes en desintoxicación, cambio de actitud, forma, manera de hablar y desarrollarse, hasta llegar al último paso, que es la reinserción social.

Juan subraya y admite que este tiempo de ocho meses puede alargarse, debido a que muchas personas pasaron más de 20 años en el alcoholismo y/o drogadicción, por lo que deben estar más tiempo, aunque también, quienes gusten quedarse para ayudar a la casa, pueden hacerlo.

Relata que cada domingo, las familias de quienes están dentro de la casa, asisten al lugar para tener reuniones y charlas acompañadas desde una doctrina cristiana.

Detalla que actualmente hay 700 personas en las diferentes casas que tienen en el estado y 50 en el caso de Oaxaca; esto, entre quienes ya pasaron el programa y quienes están en rehabilitación.

Cambio de vida

En el tiempo que Juan ha estado en la asociación, se ha dado cuenta que muchas personas que ingresan, deciden salirse y no concluir con su proceso de rehabilitación, pero hay quienes sí.

Resalta que para ingresar, el primer paso y más importante es que quieran estar en este lugar y quieran rehabilitarse, pues los demás requisitos no importarán.

Comparte que conoció a un joven que era ingeniero agrónomo y llegó a rehabilitarse a la casa ubicada en Oaxaca, y consiguió salir adelante, participó en el programa de reinserción en el Estado de México y actualmente, junto con su familia, han ayudado a otras personas de la asociación.

Juan González agradece a la ciudadanía oaxaqueña por apoyar a la asociación con donaciones y también invita a quienes quieran rehabilitarse a buscarles para darse cuenta que hay una vida más allá de las adicciones.