El arranque de sexenio ha sido violento para las mujeres. En sólo 14 días, seis fueron asesinadas en Oaxaca; en promedio una cada dos días.
“Grandes son los desafíos que tiene Salomón Jara, uno de los prioritarios es la prevención, atención y erradicación de la violencia de género y su máxima expresión la violencia feminicida. Lamentablemente los recientes asesinatos violentos de mujeres ocurridos en los primeros días de su gobierno, son una muestra del impacto del abandono de las políticas públicas enfocadas a la protección de la integridad y a vida de las oaxaqueñas”, indicó Angélica Ayala Ortiz directora general del Grupo de Estudios Sobre la Mujer Rosario Castellanos (GESMujer).
La activista feminista demandó al actual gobierno del estado encabezado por Salomón Jara, asumir en los hechos el compromiso de no simular datos y actuar en consecuencia con acciones de alto impacto a favor de las niñas y las mujeres.
En su registro, la plataforma Violencia Feminicida de la organización feminista Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad, detalla una de las víctimas de diciembre fue Ivette de 36 años de edad asesinada en San Gabriel Mixtepec cuando se encontraba en su domicilio. Ahí personas armadas abrieron fuego contra ella.
Otra víctima fue Adela M. A. de 58 años de edad, quien fue hallada en un barranco presuntamente con un golpe en la cabeza en Nejapa de Madero; Yadira Ivette de 40 años de edad originaria de Santos Reyes Nopala, quien fue asesinada de un disparo; Antonia Saraí R. H. de 20 años de edad cuyo cuerpo fue hallado sin vida sobre un camino de terracería en la población de Matías Romero.
Además de Diana Edith G. H. de 49 años de edad quien fue asesinada en El Rosario, San Sebastián Tutla por sujetos armados a bordo de una motocicleta. Este miércoles 14 de diciembre fue hallado el cuerpo de otra mujer en Salina Cruz. Su nombre era Adela Mía C.V. y presentaba varios impactos de bala.
El artículo 411 del Código Penal del Estado de Oaxaca señala que comete delito de feminicidio quien prive de la vida a una mujer por razones de género, es decir cuando la víctima presente signos de violencia sexual de cualquier tipo; se le hayan infligido heridas, escoriaciones, contusiones, fracturas, dislocaciones, quemaduras, mutilaciones o signos de asfixia, previos o posteriores a la privación de la vida; existan datos, información que refiera algún tipo de violencia, en cualquier ámbito previo a la comisión del delito o amenazas, acoso y maltrato del sujeto activo en contra de la víctima, aun cuando no haya denuncia, querella o cualquier otro tipo de registro.
Los mismo cuando el cuerpo, cadáver o restos de la víctima hayan sido enterrados, ocultados, incinerados o sometidos a cualquier sustancia que lo desintegre; el cuerpo, cadáver o restos de la víctima hayan sido expuestos, abandonados, depositados o arrojados en bienes del dominio público o de uso común o cualquier espacio de libre concurrencia; que haya sido incomunicada o privada de su libertad, cualquiera que sea el tiempo previo a su muerte.
Por desprecio u odio a la víctima motivado por discriminación o misoginia; haya existido entre el activo y la víctima una relación sentimental, afectiva o de confianza; existan antecedentes o indicios que la agresión cometida contra la víctima, haya tenido como finalidad impedirle el ejercicio de su derecho de votar o ser votada, en la elección de autoridades estatales o municipales.
“Lamentablemente los recientes asesinatos violentos de mujeres ocurridos en los primeros días de su gobierno, son una muestra del impacto del abandono de las políticas públicas enfocadas a la protección de la integridad y a vida de las oaxaqueñas”. Angélica Ayala Ortiz, directora de GES Mujer
