Ana Lilia Pacheco
Integrantes de la Unión de Pepenadores se manifestaron contra el cierre del relleno sanitario ubicado en el municipio de la Villa de Zaachila, ya que perderían el empleo que han tenido desde hace más de 40 años.
Como parte de la conmemoración del Día del Reciclador, señalaron que no se les ha hablado al respecto del tema y de las alternativas de empleos que podrían ofrecerles, por lo que recomendaron que el actual relleno sanitario se amplíe como recientemente se ha sugerido.
Patricia García, presidenta de la Unión de Pepenadores, informó que son más de 250 personas las que trabajan en el relleno sanitario y que se verían afectadas en caso de que este cierre ya que es su única fuente de ingreso.
“No nos oponemos al cierre, pero sí nos preocupa qué será de nosotros”, aseguró.
Don Jerónimo López, quien también es reciclador, afirmó que preferirían que el relleno sanitario se extendiera a que se cierre o sea trasladado a otro lugar, pero en caso de que se opte por lo segundo, afectaría a terceros.
Explicó que alrededor del relleno sanitario hay personas que se benefician porque les venden comida tanto para quienes van a dejarles desechos como para los trabajadores, además de ofrecer otros servicios.
Los trabajadores lamentaron que las autoridades los buscan durante las campañas, pero al conseguir los cargos, ya no se acuerden de ellos y que no los consulten para conocer sus inquietudes o afectaciones.
Cabe señalar que después de 40 años de servicio y ante la imposibilidad de construir otro relleno sanitario por la negativa de las autoridades municipales a que se instale en sus demarcaciones territoriales, el gobierno estatal busca ampliar el tiradero existente en el municipio de la Villa de Zaachila donde diariamente se vierten 859 toneladas de desechos sólidos.
De acuerdo a información de la Secretaría del Medio Ambiente, Energías y Desarrollo Sustentable (Semaedeso), para ello se destinarán 22 millones de pesos de recursos adquiridos con deuda pública, autorizados en octubre del 2019 por la 64 Legislatura.
La autoridad manifiesta que tampoco ha sido sencillo que los ejidatarios aprueben la ampliación; “no es fácil que todos estén de acuerdo; hay mucha preocupación por parte de ellos y no se han querido hacer las cosas de manera impositiva, sino todo a través del diálogo y los acuerdos. Además, hubo cambios en la autoridad municipal y en el comisariado ejidal, lo que ha retrasado la gestión, aunque se debe tomar una decisión muy pronto”.
Panorama
859 toneladas de desechos sólidos se vierten todos los días en el basurero
40 años llevan trabajando en el basurero
250 personas estarían afectadas
