Organizaciones de migrantes oaxaqueños se manifestaron ayer en las calles de la ciudad de Los Ángeles, California, para exigir la renuncia inmediata de los concejales que utilizaron expresiones racistas y discriminatorias en contra de la comunidad indígena y afroamericana.
La llamada Marcha por la Justicia salió frente a Los Ángeles Trade Tech College, en el Washington Boulevard, y terminó en las escalinatas de la alcaldía de esa ciudad, sobre la calle Spring.
Los migrantes oaxaqueños reclamaron la dimisión de los concejales Gil Cedillo, Kevin de León y Nury Martínez.
Martínez, renunció a la presidencia del Concejo Municipal de Los Ángeles, ofreció una disculpa pública, pero no ha reconocido sus comentarios racistas y nocivos hacia las comunidades indígenas y negras.
De esta manera expresaron su profunda desilusión, rabia y dolor, porque las acciones emprendidas por Martínez no son suficientes.
“Los comentarios dejaron en claro que estos políticos no están pensando en nosotros ni nos consideran en su toma de decisiones. Tampoco piensan en nosotros cuando deciden cómo distribuir los recursos o acceder a los espacios públicos, ni consideran a las poblaciones indígenas que viven en sus distritos y en todo Los Ángeles”, afirmó la cofundadora y directora ejecutiva de las Comunidades Indígenas en Liderazgo (Cielo), Odilia Romero Hernández.
La activista subrayó que la comunidad oaxaqueña residente en Los Ángeles, ha sido una fuerza laboral esencial en restaurantes y en la construcción durante la pandemia del COVID-19, pero ha sido objeto de racismo, clasismo y discriminación por los tres concejales.
“Esta protesta es un acto de resistencia para reafirmar que nuestra comunidad no tolerará más lenguaje, violencia o actos racistas contra nosotros”, asentó.
"Incitan al odio"Destacó que las escandalosas declaraciones de los tres concejales incitan al odio racial hacia las comunidades indígenas quienes de por sí permanecen socialmente excluidas.
“Preocupa especialmente por los niños y jóvenes de nuestras comunidades indígenas que se encuentran en pleno desarrollo. Estamos indignados pero no sorprendidos, ya que los latinos blancos tienen un largo historial de discriminación. Nuestras comunidades, como las de nuestros hermanos negros, han resistido e incluso sobrevivido al genocidio”, anotó.
Ante esto, Romero Hernández demandó al presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, al senador Alex Padilla y al alcalde de los Ángeles, Eric Garcetti, su intervención para lograr la dimisión inmediata de los tres concejales.
“Esta renuncia daría inicio al proceso de sanación del daño que han causado sus declaraciones a las diferentes comunidades indígenas residentes en Los Ángeles”, terminó.
En la protesta, además de las Cielo, participaron la Asociación Oaxaqueños Unidos de Phoenix; el Centro de Unidad Popular Benito Juárez, Bakersfield: el Centro Binacional para el Desarrollo Indígena Oaxaqueño, Fresno; Club Raza Unida, Los Ángeles; la Coalición de Comunidades Indígenas de Oaxaca, San Diego; el Frente Indígena de Organizaciones Binacionales, Los Ángeles; el Grupo Folclórico Huaxyacac, Los Ángeles; Lazos Oaxaqueños, San José; Nueva Antequera, Los Ángeles; Organización Regional de Oaxaca, Los Ángeles; Oaxaca Tierra del Sol, Sonoma y Westside Alliance, Los Ángeles, entre otras organizaciones.
