La inflación, es decir el incremento de precios en productos y servicios básicos registrado en la segunda quincena de marzo derivó en un golpe económico a los pequeños comercios.
La Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (Canacope) Oaxaca, calcula que las ventas disminuyeron en un 18 por ciento desde mediados de marzo.
Para hacer frente a este fenómeno económico, la ciudadanía, principalmente la que vive en colonias de la periferia, ha tenido que echar mano de pedir fiado. Aunque esta práctica no es nueva, en Oaxaca se mantiene para ir sorteando los constantes incrementos en productos de alto consumo como el azúcar o la cerveza, los cuales registraron incrementos.
“Cada vez que hay un aumento repercute, sobre todo cuando son aumentos en productos de canasta básica porque eso representa el gasto familiar de las personas y lógicamente eso repercute en lo que pueden destinar para sus insumos y la cuestión de servicios. Las alzas los lleva a buscar estrategias financieras para solventar todas sus necesidades”, destacó el presidente de la Canacope en Oaxaca, Emilio Sánchez González.
En marzo, la inflación, es decir el incremento de precios y servicios, registró un repunte para ubicarse en 5.1 por ciento en Oaxaca, cifra por arriba del promedio nacional. De acuerdo con el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), productos como el azúcar, la cerveza y el frijol fueron algunos de los que registraron alzas.
El líder de cámara destacó que regularmente el incremento de precios coincide con los tiempos electorales.
“Esto es factor para, en determinado momento, las disputas políticas, sin embargo, confiamos en que podamos equilibrar esta situación a lo largo del año con las derramas económicas que se esperan, ya sean por vacaciones o Guelaguetza”, expuso.
Llamó a los comercios agremiados a no caer en incrementos excesivos de precios y buscar estrategias para que las personas no se priven de los productos de primera necesidad.
“Tenemos que tener cuidado en no subir tanto los precios, hay que buscar mecanismos para que con las mismas reservas que se tienen, realizar nuestra labor, quizá haciendo ofertas y promociones”.
Sánchez González destacó que, aunado a la inflación en el caso del comercio en la capital de Oaxaca, se vio afectado por la baja presencia de turismo durante las vacaciones de semana santa debido a la euforia de la supercarretera a Puerto Escondido.
“La gente aprovechó para irse de vacaciones y la ciudad se vio semivacía. El flujo económico se empezó a reestablecer con el regreso a clases. Esperemos que esto sea temporal”, destacó.
