Con el asesinato de Mónica en Mixtequilla, suman cuatro mujeres privadas de la vida durante agosto. En lo que va del 2022 han sido contabilizadas 90, el 28 por ciento de los casos registrados en la región del Istmo, siendo esta la zona de mayor riesgo para las mujeres en Oaxaca
“La región del Istmo, se mantiene como la zona de mayor riesgo para la vida de las niñas y las mujeres de Oaxaca. Con la más reciente muerte violenta en Santa María Mixtequilla de una mujer en su hogar, se ha superado el registro de feminicidios durante el 2021, pues en el 2022 ya se han acumulado 90 lamentables casos, frente a los 87 con los qué cerró el año anterior”, señaló la presidenta del Grupo de Estudios Sobre la Mujer Rosario Castellanos (GESMujer), Angélica Ayala Ortiz.
En el análisis realizado por la organización feminista basada en su monitoreo, detalla que el primer lugar en el cual las mujeres y niñas han sido víctimas de violencia extrema, con un 36 por ciento ha sido en su propia casa e incrementándose cada día las muertes violentas por impacto de bala con un 78 por ciento.
“Frente a esta indignante situación, se urge a las instancias encargadas de prevención, atención y sanción de todas las formas de violencias hacia las niñas y mujeres, a atender a una de las recomendaciones de la declaratoria de alerta por violencia de género: Realizar un mapeo de las condiciones del contexto social en las que ocurren estas violencias”, pidió.
En la región del Istmo -abundó- hay dos indicadores claros sobre los cuales hay que hacer una revisión puntual: “los feminicidios ocurren en las casas y con armas de fuego, lo que implica hacer un diagnóstico de las deficiencias que enfrentan las instancias oficiales, los programas federales, estatales y municipales que tienen dentro de sus responsabilidades atender la grave problemática de violencia que se vive en la región”.
Agregó que uno de los principales problemas identificados ha sido la falta de mecanismos de coordinación para prevenir y atender las violencias, lo que genera que las mujeres pierdan valioso tiempo recorriendo diferentes oficinas, sin lograr una atención resolutiva.
En materia de sanción el problema es la impunidad, dado que no se garantiza una investigación adecuada, profesional y con perspectiva de género, lo que limita la posibilidad de integrar carpetas que lleven a la sanción de quienes ejercen las violencias, incluyendo la violencia feminicida, sostuvo.
“La administración de Alejandro Murat, a punto de concluir deja una deuda invaluable de 672 víctimas de violencia feminicida, sus familias, comunidades y sociedad en general exigimos justicia y alto a la impunidad”, resaltó.
“La administración de Alejandro Murat, a punto de concluir deja una deuda invaluable de 672 víctimas de violencia feminicida, sus familias, comunidades y sociedad en general exigimos justicia y alto a la impunidad”. Angélica Ayala Ortiz, Presidenta de GES Mujer
Peligro en el hogar
36 % ha sido víctima en su propia casa
