Las instituciones tienen como una tarea fundamental que el derecho a defender derechos no se tenga que escribir con sangre y mucho menos a costa de la vida, aseguró la titular de la Coordinación para la Atención de los Derechos Humanos (CADH), Flor Estela Morales Hernández.
Por la conmemoración del Día Internacional de las Personas Defensoras de Derechos Humanos, la funcionaria sostuvo que una persona defensora no debería vivir siempre en constante peligro, ni ser considerada como tal, hasta después de su funeral.
“Eso es algo que las instituciones, ni la sociedad deberíamos de normalizar”, anotó.
Por eso, explicó que el Acuerdo para el Reconocimiento y la Protección de las Personas Defensoras de Derechos Humanos en Oaxaca, suscrito por la CADH con organizaciones de la sociedad civil, permitirá sumar esfuerzos y así quienes empujan pequeños y grandes cambios en el medio rural, se inscriban en los grandes discursos en torno a los derechos humanos y se autonombren personas defensoras de derechos humanos.
Además, subrayó que el CADH se ha comprometido a impulsar e implementar actividades de formación y campañas de concientización, orientadas a proveer información a la sociedad, acerca de los derechos de las personas defensoras y sobre la importancia de su trabajo, así como el rol central en la consolidación del Estado de derecho y el fortalecimiento de la democracia.
“Es decir, partimos de la necesidad de que las personas que están generando cambios en favor de los derechos humanos, se reconozcan ellas mismas como personas defensoras de derechos humanos”, añadió.
Destacó que resulta importante el reconocimiento de las personas como defensoras, porque existe una serie mecanismos y de derechos para garantizar su labor.
De esta manera, destacó que el Acuerdo para el Reconocimiento y la Protección de las Personas Defensoras de Derechos Humanos en Oaxaca suma esfuerzos institucionales con la sociedad civil organizada para dar entender a los servidores públicos la importancia de la labor realizada por las personas defensoras de derechos humanos y garantizar su trabajo.
Morales Hernández dijo que este pacto también impulsa procesos de difusión y promoción de la cultura de los derechos humanos, pues un derecho no conocido difícilmente se reclama.
“La historia nos ha enseñado que algunos, la mayoría de derechos tal vez, incluso han tenido que arrebatarse”, terminó.
“La historia nos ha enseñado que algunos, la mayoría de derechos tal vez, incluso han tenido que arrebatarse”.
Flor Estela Morales Hernández
Titular de la CADH
