
Oaxaca es la entidad con la menor recaudación por habitante en agua entubada. Mientras que en Baja California la recaudación per cápita es de 1,763.00 pesos, en la entidad es de apenas 70 pesos.
La investigación “¿Cuál es el costo real del agua en México?” elaborado por el Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO), señala que pagar tarifas elevadas puede afectar el bienestar de los grupos más vulnerables de la población, sin embargo, tarifas demasiado bajas pueden perjudicar la infraestructura para su acceso y, por ende, la calidad del servicio.
“El propósito de tarifas efectivas y eficientes es la viabilidad financiera, es decir, que las entidades encargadas de la provisión de agua potable cuenten con los recursos necesarios para mantener y expandir la infraestructura y los servicios a lo largo del tiempo. Asimismo, se debe garantizar la transparencia de los criterios para la definición de tarifas, así como la responsabilidad ambiental para promover sistemas sostenibles y la conservación del agua”, señala la investigación recientemente publicada.
El IMCO explica que la definición de tarifas para el suministro de agua potable en México carece de una metodología uniforme a nivel nacional. Esto se debe a que cada entidad dentro cuenta con su propia legislación relacionada con el uso del agua.
Las tarifas no reflejan el costo total del suministro de agua potable, ya que son subsidiadas por el gobierno federal bajo consideraciones sociales, es decir garantizar que todos los ciudadanos puedan acceder a agua potable a precios asequibles, sin embargo, “el esquema actual ha demostrado ser ineficiente al beneficiar principalmente a los grandes usuarios, por lo que se requiere replantear la forma en que se otorgan los subsidios para permitir recaudar mayores recursos sin afectar el bienestar de la población más vulnerable”, indica.
El pago por el agua potable, indica el IMCO, debería de garantizar su disponibilidad y calidad, pero esto no ocurre. En la actualidad son 11.5 millones de hogares que no disponen de agua potable diaria tanto en entidades en donde el costo per cápita es alto como en aquellos en donde se paga poco.
Ante la falta de garantía, la población tiene que acarrearla de lugares lejanos o adquirirla a través de pipas. En enero de 2023, el precio promedio de una pipa de 10 mil litros fue de 1,180.30, aunque en Monterrey llegó hasta los 3,074.00 pesos.
Para el caso de Oaxaca, de acuerdo con el IMCO, fue de 875.38 pesos, para Tuxtla Gutiérrez 598.67. Entre enero de 2022 y enero de 2023 hubo un incremento del precio de 20 por ciento a nivel nacional.
Tras el análisis el IMCO propuso: mejorar los sistemas de información tarifaria y establecer subsidios diferenciados para el sector agropecuario de acuerdo con el consumo de agua, ambas acciones por parte de la CONAGUA. Además, actualizar las tarifas eléctricas para el bombeo de agua por rango de consumo en el sector agropecuario por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Evaluar anualmente las tarifas de agua potable en el sector industrial por parte de los Estados; Fortalecer la planificación estatal del agua de modo que la recaudación tarifaria sea equitativa con el gasto, en coordinación entre la CONAGUA y la SHCP; Fortalecer a los municipios para mejorar los sistemas de cobro y de monitoreo por parte de los estados y la federación (CONAGUA).