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Las meras meras se adueñan de la noche y ponen fin a muertos en Oaxaca

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Foto(s): Cortesía
Nadia Altamirano Díaz

Villa de Etla, Oaxaca.- Noviembre en el Valle Eteco es prolongar por casi 20 días las festividades de los fieles difuntos, entre comparsas y muerteadas que inundan las calles de las poblaciones con versos satíricos y música de banda que se extingue después del amanecer.

Las muerteadas de este municipio que destaca en el Valle Eteco por preservar la representación del “cuatro tradicional”, cerrarán este sábado con Las meras meras, un grupo de mujeres que esperaron tres años para volver a salir a las calles y visitar casas para cantar salmodias y bailar 12 horas continuas.

“Va a ser la locura”, describe Patricia Cruz Mendoza, la iniciadora de Las meras meras, cuando se le pregunta sobre sus expectativas de la gente que convocarán seis años después de que las mujeres decidieron organizar su propia muerteada.

Feminizar las tradiciones

Saben que no son las únicas y que años antes que ellas ya se habían organizado Las Charrudas de San Sebastián Etla, Las Chapulineras de Nazarena o Las Chocositas de San Andrés Zautla, pero para las participantes Fany Velásquez Cruz y Rosa Isela Martínez Bautista, implementar una muerteada femenil es dar un giro a una tradición en la que imperaban los hombres y ganar espacios públicos, donde la crítica social y política transcurre entre burlas.

En 2016 fue Paty quien empezó a convocar a amigas, se necesitaban al menos 12 mujeres para formar el cuadro tradicional y cubrir los personajes de la muerte, la muerta tendida, el viudo, una pareja de viejos, la diabla, las ministras que sustituyen a los sacerdotetres, las espirituistas, la doctora y su ayudante "Salta pa'trás".

Organizarse, recuerdan, no fue difícil.

Cada quien se encargó de costear su disfraz, algo que hacen hasta la fecha, y algunos días de ensayos bastaron porque, aunque la muerteada tiene evocaciones a una representación teatral, no hay un guión como tal, son pocos los versos que no cambian y la mayoría es improvisación.

En las salmodias se recogen los hechos y temas más relevantes de la comunidad en el que siempre predomina el desempeño de la autoridad municipal y el nombre de la doctora, la muerta y otros personajes, detalla Fany.

Se personalizan de acuerdo a la situación, como lo hicieron el 30 de octubre durante su participación en la Plaza de la Danza, donde la médica tenía el nombre de Virginia, en alusión a la titular de los Servicios de Salud de Oaxaca.

Burlarse improvisando

“Lo que ensayamos (generalmente en reuniones nocturnas) no es lo que mostramos (la noche de la muerteada), es como para entrar en calor y agarrar el tono de los versos, la mayoría es improvisación”, explica Rosa, a quien Paty invitó porque al salir de misa “intuí que sería buena para las salmodias”, como se le llama al canto eclesiástico.

Y así lo hizo Rosa en la primera edición de Las meras meras, disfrazada de ministra, en alusión al cargo clerical más alto al que puede aspirar una mujer, ya que en la muerteada de los hombres esté personaje es el de un sacerdote.

Para el año siguiente Rosa cambió su participación con el personaje de Buena Vieja y se convirtió prácticamente en quien dirige el cuadro de la muerteada, ya que es quien abre los diálogos, responde o remata las salmodias que cantan las ministras y su pareja, el Buen Viejo, permanece callado.

La espontaneidad necesaria para “contestar a todo mundo”, a veces con albures, es una cualidad que Rosa trae en la sangre, ya que desde los cuatro años recuerda ver a su padre Pascual disfrazarse de viejo para irse cada noche del 1 de noviembre a la muerteada y volver hasta el día siguiente.

Ella, como sus compañeras, sabe que el cuadro que representa el dolor de un hombre cuya mujer murió mientras está tendida en el piso, evoca la parte científica con la intervención de la médica, la religiosa con las ministras y lo místico con las espirituistas que al lograr revivir a la muerta hacen que comience la pachanga.

No es sólo bailar disfrazadas 

“Todos los personajes de hombres se adaptaron, no quisimos sólo meter la banda para bailar disfrazadas, sino rescatar el cuadro”, expresa Paty, quien comparte con otras iniciadoras el peso de conseguir al menos cien mil pesos para financiar los gastos, principalmente el de dos bandas que quieran tocar y caminar durante 12 horas.

Han intentado que la mayoría de participantes, desde la pinta del mural, sean mujeres, pero todavía hay áreas, como la musical, donde siguen predominando los hombres.

Las meras meras saben que la noche de este sábado será su noche y por horas jugarán a esconderse de la muerte con otro rostro que mostrarán hasta la mañana del domingo, al llegar al panteón municipal para cantar las mañanitas a sus difuntos y recordar que así lugar al terminar la vida llegarán así, sin máscara.

LA MUERTEADA FEMENIL

¿Quiénes conforman el cuadro tradicional?

La muerte con la guaraña

La muerta tendida

El viudo

Una pareja de viejos

La diabla

Las ministras que sustituyen a los sacerdotetres

Las espirituistas

La doctora y su ayudante "Salta pa'trás"

Inicia a las 21:00 horas de este sábado 19 de noviembre

Punto de salida: Crucero de la Villa de Etla

Tiempo de duración aproximado: 12 horas.

Se recorren las principales calles de la población.

Se visitan en promedio 14 casas donde los propietarios comparten bebidas y alimentos.

Bandas que musicalizarán: La inovadora de Oaxaca y Los chicos del pueblo

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