El tener un ser querido con alguna adicción, ya sea alcohol, estupefacientes o problemas emocionales como la neurosis, también afecta a quienes viven y conviven con ellos como pareja, amistades y familiares, por lo que hace más de 35 años nació Familias Anónimas.
Adriana, integrante de este grupo, relata que en el caso de Oaxaca, abrieron hace 26 años y desde entonces han apoyado emocionalmente a madres, padres, hijos, esposas, esposos, hermanas, hermanos y demás personas, a ver la adicción de otra forma.
“Yo llegué ignorante de lo que pasaba en mi vida, hasta que llegué aquí y me quedé. Hasta la fecha me quedé y he regalado lo dado”, expone.
En el caso de Juanita, relata que el haber llegado a Familias Anónimas, le ha ayudado a enfrentar la situación, pues antes de llegar a este lugar, su vida no tenía sentido e incluso pensaba en la muerte por la situación.
Respuestas a diversas situaciones
Adriana menciona que a este lugar llegan principalmente padres y madres que no tienen explicación al comportamiento de sus hijas e hijos, pues se cuestionan el por qué dejan de ir a clases, bajas calificaciones y diferente conducta.
“Lo primero que señalamos es que siempre se les ha dado un amor frágil, pues podemos decir ‘yo no te puedo cambiar, sólo amar’ Este programa es de fe, vida y esperanza que ha ayudado a varias personas y familias”, expone.
Lamenta que las personas que llegan a este lugar, en su mayoría es porque sus familiares tienen problemas con las drogas, por lo que buscan un grupo en el que se sientan comprendidas y puedan recibir alguna palabra de apoyo o recomendación.
“El programa no sólo sirve para mi ser querido. Conforme pasa el tiempo, cada persona que llega a este lugar comienza a tener la fortaleza para hacer cambios para poner límites”, asegura.
Las participantes del grupo comparten que se basan en la filosofía de los 12 pasos, tienen una tribuna en la que exponen sus experiencias, tienen temas específicos, cuentan con un área de literatura, entre otros.
No se resuelve la vida
Juanita y Adriana subrayan que estar en este grupo no resuelve la vida de todos los problemas, pero ayuda a enfrentarlos.
“Podemos decir: ‘tengo problemas, pero puedo sonreír, hay respeto. En lo personal, lo más hermoso es que es un gran servicio para los padres, pues cuando llegan dicen ‘me quiero morir porque existe adicción en mi casa y no sé qué hacer’”, señalan.
Detallan que en este grupo les ayudan a las familias de las personas adictas sobre el autocuidado, protección de uno mismo y dejar atrás las ideas de que deben ser cuidadoras, protectoras y demás actitudes que dañan más tanto a quienes tienen adicciones, como a sus familias.
"No están solos"
Las integrantes del grupo y quienes realizan servicios en éste, afirman que cada que una persona llega, les exponen que no están solas, que cuentan con ayuda profesional, además de las y los integrantes, por lo que el llegar a este lugar, es un alivio para muchas personas.
Al grupo asisten varias personas en diferentes horarios y temporadas, pues no tienen que cumplir con un específico de horas, días o meses, por lo que invitaron a quienes tengan un ser querido con alguna adicción, a que brinden un momento para ellos y romper ataduras que se han hecho por mucho tiempo.
“Muchas personas tienen estigmas sobre las adicciones o un familiar con estas, por eso es que nosotros siempre garantizamos anonimato y que lo que se habla en el grupo, se queda en el grupo”, destacan.
DIRECCIÓN DE FAMILIAS ANÓNIMAS:
3ra Privada de Murguía 203, Jalatlaco, Oaxaca de Juárez.
Teléfonos: 951 35 756 77
LA CIFRA
26 años tiene Familias Anónimas que llegó a Oaxaca.
¿QUIÉNES ASISTEN A LAS SESIONES?
Familiares con adiciones:
- Drogas
- Alcohol
- Problemas emocionales
PARA SABER
Las Familias Anónimas trabajan bajo 12 pasos, desde:
1) Admitimos que éramos impotentes ante las drogas y las vidas de otras personas y que nuestras vidas se habían vuelto ingobernables.
Hasta
2) Habiendo tenido un despertar espiritual como resultado de estos pasos, tratamos de llevar este mensaje a otros y de practicar estos principios en todos nuestros asuntos.
