Este 21 de diciembre se cumplieron 9 años del feminicidio de Ivonne Guevara Reyes, así como 9 años sin justicia.
“Este día es para mí desgastante. Es un profundo dolor porque es revivir, revivir a qué horas me dieron la noticia, a qué hora me entregaron el cuerpo; es remover aquel dolor tan intenso, un dolor que no puedo explicar simplemente. Yo me pregunto ¿sabe el que le quitó la vida a mi hija, José Manuel Luis Durán, estará consciente de lo que hizo hoy en esta fecha? Mi hija murió sin saber quién la mató y, lo más triste, ni por qué la mataron”, relata Adriana Reyes, madre de la joven asesinada en 2014 afuera del bar Banda Oax.
A pesar de las dificultades y obstáculos que ha enfrentado en su búsqueda de justicia, Adriana sigue firme, realizando su propia investigación y enfrentándose a distintos retos para obtener respuestas. A pesar de los avances en la investigación y la identificación de algunos testigos, la conclusión del caso aún parece distante.
Esta lucha, marcada por el deseo de justicia para su hija, continúa siendo una batalla en un sistema que, afirma Adriana, parece insensible a la tragedia de quienes sufren pérdidas como la suya.
“En esta Navidad, 9 en realidad, es tener en mi hogar otra vez una silla vacía. De alguna manera estamos con ella en el momento del brindis de la cena, estamos y no está. Y seguimos con esa silla vacía. Eso al sistema, al gobierno no le importa. Desgraciadamente no le importa porque pues, como no es hija de funcionarios o diputados. Ahora con lo que me quedo, simplemente es lo que ella me enseñó: amor”.
La joven era una brillante estudiante, deportista y ser humano excepcional.
Para honrar su memoria, su madre realizó una ceremonia de rezo a las 6 de la mañana en la habitación que solía pertenecer a Ivonne. Familiares, amigos y conocidos se unieron para rendir homenaje, llevando flores y velas al panteón de Santa Cruz Xoxocotlán. La música resonó con acordes de guitarra, entonando las melodías favoritas de Ivonne en su honor.
A las 7 de la noche, una misa especial se llevó a cabo en la iglesia de Santa Elena de la Cruz en el jardín de Xoxo. La ceremonia fue dedicada con la intención de honrar su eterno descanso.
