La brecha de género en las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) y las disciplinas STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) persiste como un desafío imperante en el Sureste de México, que requiere de acciones urgentes y decididas. A pesar de los avances en la igualdad de género en diversas esferas del ámbito laboral, las cifras revelan una clara disparidad entre hombres y mujeres en estas áreas en la región.
En el Sureste de México, son pocas las mujeres que optan por ingresar a estudios en TIC y STEM, lo que resulta en una representación baja en empleos (17% ), oportunidades de negocios y carreras universitarias (30% ) relacionadas con estos campos, a nivel nacional. Las decisiones de carrera de las mujeres suelen estar influenciadas por factores familiares, que, en ocasiones, pueden derivar de percepciones estereotipadas sobre capacidades y roles de género. Esto se agrava, en algunos casos, por el rezago educativo que existe en algunas regiones de México, que se intensifica en estados como Chiapas y Oaxaca, donde los índices de rezago educativo superan el 60% e incluso el 70% .
Causas y Consecuencias de la Brecha de Género
La brecha de género en estas áreas se debe a múltiples causas y deriva en igual cantidad de consecuencias. Por un lado, se debe en alguna medida a factores sociales y culturales que influyen en las decisiones educativas y profesionales de las mujeres. En etapas tempranas de la educación, las niñas tienden a mostrar un desempeño ligeramente mejor al de los varones en habilidades matemáticas. Sin embargo, esta tendencia tiende a revertirse en la secundaria y se agrava en el bachillerato debido a estereotipos de género, falta de modelos femeninos, deficiencias en la orientación vocacional y presiones sociales .
Por otro lado, la brecha de género en TIC tiene un impacto negativo en el desarrollo económico y social de las economías. Se estima que México enfrenta una notable escasez de talento en habilidades tecnológicas, lo que se traduce en cerca de 140,000 puestos de trabajo sin cubrir en TIC cada año . Esto limita la competitividad y la innovación del sector, así como las oportunidades de crecimiento para las mujeres. Las mujeres que eligen una carrera en TIC disfrutan de una mayor vinculación con empleos estables y condiciones laborales favorables, lo que resalta las ventajas de una mayor inclusión. El ingreso promedio de las mujeres empleadas en TIC es un 56% mayor que el promedio de las mujeres en la fuerza laboral de México , lo que subraya la importancia de abrir oportunidades en este sector.
Acciones para Cerrar la Brecha
Ante este panorama, se hace necesario abordar la brecha de género en TIC con acciones concretas y coordinadas entre los diferentes actores involucrados. El sector privado tiene un papel clave para impulsar la inclusión y la diversidad en el sector tecnológico.
Además del sector privado, otros actores como el gobierno, la academia, los medios de comunicación y la sociedad civil tienen un rol importante para cerrar la brecha de género en TIC. Estos actores pueden contribuir a crear un entorno favorable para que las mujeres se interesen y se involucren en el sector tecnológico, mediante políticas públicas, programas educativos, campañas de sensibilización y apoyo a iniciativas existentes.
Un ejemplo de estas iniciativas es el programa Conectadas by IYF, que tiene como objetivo inspirar a las personas jóvenes, padres y empleadores para que las mujeres jóvenes busquen y encuentren caminos exitosos en el área de las TIC. Acompañadas por la campaña “Haz que suceda", ambas iniciativas cobran un papel crucial. Implementadas por la International Youth Foundation (IYF) con el apoyo de Google.org, tienen como objetivo inspirar a jóvenes, padres y empleadores, desafiar los estereotipos de género, promover modelos a seguir y crear conciencia sobre las oportunidades en TIC y STEM, para que las jóvenes encuentren un camino exitoso en estos sectores.
Estas iniciativas son solo algunas de las muchas que existen para fomentar la participación de las mujeres en estas industrias. Se requiere de un esfuerzo conjunto y sostenido para lograr una mayor equidad e inclusión en estos campos, que son fundamentales para el desarrollo del país y el bienestar de las mujeres.
El llamado a la acción es claro: promover un cambio de mentalidad, fomentar la igualdad de oportunidades y eliminar los estereotipos arraigados en el Sureste de México. La brecha de género en TIC y STEM no solo afecta a las mujeres, sino que también limita el potencial de crecimiento de la región y del país en su conjunto.
Más sobre IYF y sus programas:
IYF® trabaja para, por y con las personas jóvenes. Fundada en 1990, la IYF es una organización mundial sin ánimo de lucro con programas que han beneficiado directamente a 7.7 millones de jóvenes y sus operaciones abarcan más de 100 países hasta el momento. Junto con organizaciones comunitarias locales y una red de empresas, fundaciones y socios multilaterales, conecta a las juventudes con oportunidades para transformar sus vidas. Cree firmemente que las y los jóvenes educados, empleados y comprometidos tienen el poder de resolver los problemas más difíciles del mundo. Su visión es ver a las juventudes inspiradas y equipadas para realizar el futuro que desean. IYF: Transformar vidas, juntos.
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