Cuando su hermana le pidió a Alejandro que le hiciera el favor de llevarla a tomar su vuelo al aeropuerto de la Ciudad de Oaxaca, Jorge creyó que la mejor ruta del municipio conurbado de Santa María Atzompa a Santa Cruz Xoxocotlán sería el Circuito Interior, sin imaginar que en las riberas del Río Atoyac el socavón de casi diez metros que se abrió hace un año, sigue sin repararse.
“Casi no paso por acá, no cabe duda que no hace nada el gobierno, ya tiene rato que está así”, expresa al detener la marcha de su automóvil compacto y dilucidar si avanza por el bordo del río, como el resto de vehículos, o intenta pasar por sobre la banqueta, como lo hace un Volkswagen y varios mototaxis.
Por fugas de agua, colapsó concreto hidráulico
Artemio, vecino de la zona, recuerda que el 15 de diciembre de 2022, él presenció cuando cinco carros que transportaban madera pasaron sobre esta vía y colapsó, porque había dos fugas de agua que deslavaron la tierra debajo del concreto hidráulico.
“Ya modificaron la tubería, tiene cuatro meses que metieron el tubo nuevo, pero todo lo dejaron así, no lo han venido a tapar”, expresa con la seguridad de que el agua no se filtra más.
Él mismo ha atestiguado que en dos ocasiones, personal del Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (Soapa) acudió para verificar que no haya fugas, pero la reparación del concreto hidráulico no tiene para cuándo.
“Se ha quedado abandonado, esperemos que ya lo vengan a componer o al menos a rellenar. Siempre es un problema entre los mototaxis de aquí de San Martín o San Juanito con una que otra persona que pasa o luego los coches”, relata.
Sin fecha para repararlo
En lo alto de un poste de concreto, una señal vial de desviación por el bordo del río Atoyac es lo único que advierte que esa vía no se puede utilizar. “De haber sabido que no se puede pasar me voy por otro lado, pero no hay nada que advierta que debo pasar por un tramo de terracería”, expresa enfadado Luis, un conductor foráneo.
Ángel, quien acumula 14 años como taxista, sabe bien que el socavón no ha sido reparado, pero cuando debe cruzar por la zona, es más fácil utilizar esta vía que alguna otra, para aquilatar su tiempo.
“Ya tiene bastante y nos afecta a nosotros como taxistas o como transporte que esté así, o bueno, a todas las personas que tenemos que venir a la Central de Abasto; es una opción para salir y si el gobernador no puede ver que se atienda, pues que lo saquen y pongan a otro que sí haga obras porque todas las calles están muy feas”, opina.
Grandes pedazos de concreto rodean el socavón sobre el que la tierra, maleza y basura demuestran que no ha intentado ser reparado.
La polvareda se levanta una y otra vez por el paso de vehículos de todos los tamaños que lo rodean entrando al margen del río, convertido en tiradero de escombro y área de maniobra del Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez, de los desechos sólidos urbanos.
Motocicletas y mototaxis alcanzan a evitar caer en el socavón transitando sobre el concreto hidráulico que no se hundió o improvisando la banqueta como carretera, sin respetar si camina algún peatón.
En teoría agilizaría el tránsito vehicular
Esta vía se trazó a la par de uno de los márgenes del río Atoyac y se le conoce como Riberas del Río Atoyac a partir del puente Guadalupe Victoria, donde termina la Avenida Manuel Gómez Morín.
En inmediaciones de la Central de Abasto, después del puente Bicentenario, es una vía paralela para quienes requieren incorporarse al Boulevard Guadalupe Hinojosa y llegar a la zona de Santa Cruz Xoxocotlán.
Este tramo de Riberas del Río Atoyac forma parte de los 19.3 kilómetros del Circuito Interior que comunica con municipios como San Antonio de la Cal o Ánimas Trujano.
A través de esta vía se llega también a la exfábrica de triplay, predio de 12 hectáreas donde se construye el Parque Primavera Oaxaqueña, espacio recreativo insignia de la administración estatal actual.
SOCAVÓN
Un año sin programar su reparación.
Se ubica a un kilómetro de lo que será el Parque Primavera Oaxaqueña.
Es parte del Circuito Interior inaugurado en noviembre de 2022 tras una inversión de 518 millones de pesos.
“Ya tiene bastante y nos afecta a nosotros como taxistas o como transporte que esté así, o bueno, a todas las personas que tenemos que venir a la Central de Abasto".
Ángel
Taxista
