El conflicto interno que existe en el Centro de Salud Urbano número Uno desde que en enero pasado se eligió a una nueva delegación sindical, volvió a revivirse ayer que las y los trabajadores de base protestaron en el acceso principal, donde colocaron cartulinas en las que plasmaron su petición: la salida de Roselyn Trejo López.
Dicho trabajador compitió por la delegación sindical en la que fue electa la química Angelina Baray Calderón, quien expresó que el hartazgo de que se tome atribuciones de gestionar y autorizar beneficios sindicales a algunos trabajadores, se decidió tomar las instalaciones.
La inconformidad se sustenta en un oficio que respalda la firma de 70 trabajadores, quienes piden la salida o sanción del químico Roselyn Trejo, quien violó estatutos sindicales al crear división y usurpar funciones “como si fuera delegado sindical”.
Como la mayoría de unidades médicas, la base trabajadora Centro de Salud que se ubica en la calle de Francisco Javier Mina, en el Centro Histórico de la ciudad de Oaxaca, está adherida a la Sección 35 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA) y su representación es a través de un delegado o delegada que funge por determinado tiempo.
El relevo se realizó en enero pasado, pero al no beneficiarse de la elección, Roselyn Trejo López, quien es cuñado del ex secretario general de la Sección 35, Mario Félix Pacheco, no aceptó la decisión de la mayoría de las y los trabajadores y prácticamente solicitó una nueva delegación.
Así como en marzo pasado que una enfermera portó en su uniforme un letrero en el que señalaba que trabajaba bajo protesta, los directivos de este centro de salud omitieron hablar sobre este tema que consideran es interno y atañe a la dirigencia sindical atenderlo.
En eso coincide la delegada sindical Angelina Baray Calderón, quien señaló que será el secretario general de la Sección 35, Omar López Sánchez, quien debe solucionar este conflicto que afectó la atención con servicios médicos de primer nivel.
Inconformes
70 trabajadores
