El arzobispo de Antequera-Oaxaca, Pedro Vázquez Villalobos rogó ayer a Dios su intervención para que las instituciones encargadas de cuidar los monumentos históricos destinen recursos financieros a la restauración de más templos cerrados desde hace varios años por las afectaciones causadas por los recientes terremotos.
“Los necesitamos, no solamente para que nos visiten los turistas, y contemplen nuestros edificios y nuestros retablos, sino también para vivir nuestra fe, encontrarnos con Dios y alcanzar gracia y bendición de Dios”, asentó
En la homilía de la misa de acción de gracias por la reapertura del templo de San Agustín al culto público, después de la conclusión de los trabajos de restauración, oficiada con sacerdotes agustinos, franciscanos, jesuitas y diocesanos, el mitrado afirmó que los fenómenos geológicos sucedidos en los últimos años han dañado mucho a los templos, principalmente edificaciones antiguas y a veces frágiles.
“Para ninguno de nosotros, que vivimos en Oaxaca, es desconocida esta realidad”, afirmó.
De este modo, expuso que muchos de los templos cerrados durante años necesitan ser restaurados, pues no puede haber culto porque representan un peligro.
“Algunos de nuestra ciudad también tienen años cerrados. Dentro de esos recintos no puede haber culto porque es un peligro, no nos permiten entrar y por supuesto nosotros decimos, no se debe de entrar porque nos ponemos en peligro”, añadió.
Por eso, manifestó su alegría por la posibilidad de los sacerdotes agustinos de volver abrir el templo para celebrar la liturgia, administrar los sacramentos, proclamar la palabra de Dios y alimentar a los fieles con el mensaje divino, sobre todo, con el cuerpo y la sangre del Señor.
“De nuevo se puede reunir el pueblo santo de Dios en torno a este altar para ofrecer al Padre el sacrificio de su hijo Jesucristo, para abrir los oídos y el corazón a la escucha de la palabra divina. Bendito sea Dios que hemos podido entrar a nuestro templo”, anotó.
Aunque, también pidió a los creyentes a respetar el templo, sobre todo, en su exterior, porque una puerta lateral se usa para las necesidades fisiológicas.
“Entrando por esta puerta de costado se ve que no es respetado nuestro templo. Se faltaría al respeto a sus casas si alguien hace eso en sus puertas. El cuidado de los templos no solamente es responsabilidad de los sacerdotes, sino de todos, porque requiere de educación desde esa pequeña iglesia que está en sus hogares”, señaló.
De igual manera, llamó a los católicos a aprovechar esta restauración para cuidar su templo vivo del Espíritu Santo, porque en ellos habita Dios.
“A veces hay necesidad de restaurar este templo santo que somos nosotros por cosas que hacemos y que no son agradables a los ojos de Dios. Restauren ese templo del Espíritu Santo en su persona, restáurelo mañana y restáurelo siempre, para que la casa de Dios sea cada día más digna”, agregó.
Además, requirió a los creyentes cuidar también el templo del Espíritu Santo en sus hermanos para que no los desprecien, no les pisoteen su dignidad, no los humillen, no los insulten, no los maltraten, ni se enojen con ellos.
“Mírenlos con amor, con misericordia, como los mira Dios no solamente a él, sino como los mira Dios a ustedes. Así miren ustedes al hermano”, apuntó.
Vázquez Villalobos también convocó a los católicos a respetar y valorar a la mujer, hija, madre y esposa, porque su dignidad ha sido pisoteada.
“Muchos de los hombres dicen o piensan que la mujer es un ser de segundo grado, que no están a su altura, pero que equivocados están. Valoren a la mujer, mírenla como la mira Dios”, afirmó.
“A mí me llena de alegría poder compartir este momento tan especial aquí en el templo de San Agustín, porque cuando tenemos nuestros templos cerrados, sentimos que nos hace falta algo”. Pedro Vázquez Villalobos
“Le doy gracias a Dios por todas las personas que han trabajado aquí, para que esto se haya logrado. En primer lugar, mis hermanos agustinos, que están al frente del cuidado del templo y de la comunidad”. Pedro Vázquez Villalobos
