Los daños a las viviendas y edificios públicos que ocasionó el sismo de 8.2 grados Richter en la entidad debe llamar la atención sobre la falta de un marco legal y técnico para la construcción en la zona metropolitana y diversas regiones de la entidad, porque el Reglamento de Construcción y Seguridad Estructural para el Estado de Oaxaca, que hoy rige, es una copia del de la Ciudad de México y, por tanto, no considera las condiciones específica de nuestra ciudad, afirmó el presidente del Colegio Libre e Independiente de Arquitectos de Oaxaca Asociación Civil, Gerardo Corres.
Subraya, además, que es necesario actualizar el Reglamento General de Aplicación del Plan Parcial de Conservación del Centro Histórico de la Ciudad de Oaxaca de Juárez y el Reglamento General del Centro Histórico para la Protección del Patrimonio Cultural del Municipio de Oaxaca de Juárez, que datan de los años 90 y no han sido actualizados.
“Ahora sí, estamos a la de Dios en la ciudad de Oaxaca y los municipios metropolitanos, porque no existe un marco jurídico y técnico específico para ellos y toda la entidad, porque hay que tener en cuenta que no se aplican los mismos criterios de construcción en la Costa, el Istmo o la Sierra”.
El experto manifestó que se ha avanzado mucho en la forma de construir para enfrentar sismos u otros fenómenos naturales, pero en Oaxaca no se ha puesto atención a la actualización de las normas. “Llevamos años tratando de elaborar el reglamento de construcción para la capital del estado y municipios conurbados y en cada sexenio se frena”.
-¿Por qué hubo muchas casas derruidas en Juchitán por el sismo?
-Bueno,cuando se edificaron las viviendas no había reglamentos y cada quién hacia lo que podía. Se construía con adobe, cantera y en algunos casos con cemento, pero tampoco es para culpar a los constructores de la época, ellos hicieron lo que podían. Además el sismo fue en verdad fuerte, intenso, como no había habido desde hace más de 100 años en la entidad.
“Ahora con lo de Juchitán debemos revisar en qué fallaron las estructuras; ¿por qué?, para corregir todo esto y que no vuelvan a fallar. Este caso puede aportar mucho para que no vuelvan a fallar”.
El arquitecto sostuvo que por esta razón el caso de Juchitán de Zaragoza debe servir de experiencia para que se pueda avanzar en la creación de la normatividad específica para la entidad oaxaqueña.
“No podemos seguir sin un reglamento propio de construcción y seguridad estructural, sin un reglamento actualizado para el Centro Histórico, porque entonces no se están haciendo las cosas bien y luego vemos las consecuencias”.
Comentó que actualmente se aplica en la construcción en la capital del estado el Reglamento de Construcción y Seguridad Estructural para el Estado de Oaxaca, “pero es general, no específico para la zona metropolitana y, además, es una copia del de la Ciudad de México, entonces tiene poco que ver con la situación de acá y ese es el que tenemos que respetar en estos momentos nosotros”.
