Israel García Reyes
En la actualidad es común escuchar el grito homofóbico en estadios y recintos de la república mexicana, esto pese a las campañas para erradicarlo y las multas contra la Federación Mexicana de Futbol, pero sabes quién lo inició.
Según una publicación de Vanguardia, la primera ocasión donde se escuchó el grito homofóbico en los estados mexicanos de fútbol fue en 2003 durante un encuentro entre el Atlas y Guadalajara en el estadio Jalisco, cuando los seguidores de Los Zorros insultaron al portero chiva Oswaldo Sánchez en pleno partido.
Esto porque Oswaldo surgió de la cantera de los rojinegros, ante lo cual su afición no le perdonó al cancerbero su pase al odiado rival. Los seguidores de Atlas consideraron esta acción una traición y en la primera oportunidad le gritaron put... A partir de entonces el grito comenzó a popularizarse en diversos torneos.
Para el 10 de febrero de 2004 la expresión llegó a la selección nacional, durante un partido entre el Tri y el combinado de Estados Unidos en el Estadio Jalisco, en un duelo preolímpico de la Concafaf, la eliminatoria de zona.
Luego, tras su clasificación a los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, el grito se hizo casi un himno entre los seguidores mexicanos, esto cada vez que un portero rival efectúa un saque.
Sin embargo, después de una década de escuchar el grito en cada partido de México, FIFA intervino y comenzaron las llamadas de atención. En el Mundial de Brasil 2014, el Tricolor y la selección brasileña, anfitriona de la justa, se enfrentaron en el segundo juego de la fase de grupos, surgiendo de nuevo la expresión en cada despeje del portero Julio Cesar.
Lo cierto es que durante el partido de México contra El Salvador (con marcador de 3-0) en noviembre de 2015, en el inicio de las eliminatorias con rumbo al Mundial de Rusia 2018, que llegó la primera multa a la FMF y aunque México se defendió y declaró a la FIFA que el grito no era homofóbico, la multa se mantuvo y la FMF pagó 20 mil francos suizos (cerca de 395 mil pesos) en enero de 2016, lo que no les cayó nada bien a los directivos.
Desde entonces la FMF ha sido merecedora de múltiples sanciones y ha buscado la erradicación de este grito, así que ante dicha situación ha habido propuestas que no han prosperado.
Tal vez valdría la pena mantener el inició de dicha expresión: "eeeeeeehhhh... y rematarla simbólicamente con un: éjele...", lo que evitaría sanciones y mantendría el espíritu jocoso de los mexicanos contra los rivales y contra las mismas sanciones de la FIFA en estos eventos deportivos.
