Israel García Reyes
Autoridades del Reclusorio Norte de la Ciudad de México informaron que el exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio L., se encuentra actualmente aislado en una estancia fría y sin luz natural con el fin de evitar que pueda sufrir alguna agresión de parte de los demás internos.
Informaron que se encuentra recluido en la zona que las autoridades del Reclusorio Norte han destinado para vigilar a internos de reciente ingreso y descartar que padezcan coronavirus.
En este caso, la medida se tomó para evitar que pueda ser objeto de alguna agresión de la población general.
Autoridades federales reportan que Emilio L no tiene “vecinos” ni ha podido deambular por los patios, aunque ya porta el uniforme color beige de los reclusos en estas instalaciones.
El exfuncionario es acusado de operaciones con recursos de procedencia ilícita, cohecho y asociación delictuosa, por lo que fue encarcelado la tarde del miércoles pasado, luego de que el juez José Artemio Zúñiga, con sede en el Centro de Justicia Federal del Reclusorio Norte, aceptó la petición que hicieron los representantes de la Fiscalía General de la República (FGR), de Pemex y de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), de modificar las medidas cautelares que se le habían impuesto y que durante más de 15 meses le permitieron enfrentar en libertad los dos procesos penales que se le siguen.
Al parecer, su estancia en ese reclusorio representa un problema, ya que él mismo reconoció que podría correr peligro y requería de un espacio seguro y aislado, donde pudiera estar vigilado.
En el centro penitenciario hay una zona que los internos llaman “vip”, y que forma parte del área de Observación y Clasificación, es decir, donde los recién llegados pasan sus primeros días antes de ser enviados al pabellón correspondiente, de acuerdo con su grado de peligrosidad, pero en el caso de personajes como el exsenador Jorge Luis Lavalle, el exgobernador de Veracruz Javier Duarte, y otros internos considerados “sensibles” a ser agredidos por sus antecedentes en política o criminalmente, gozan de distancia con la población general.
Sin embargo, no consideran ingresar allí a Emilio, pues tanto el exmandatario como el exlegislador fueron señalados por éste de haber recibido sobornos o recursos provenientes de la empresa brasileña Odebrecht, la cual entregó 10.5 millones de dólares al exdirector de Pemex entre 2012 y 2014, respectivamente.
Hasta julio de este año, según datos del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social, en el Reclusorio Norte había 7 mil 192 internos, cuando su capacidad instalada es para 6 mil 92 personas privadas de su libertad, es decir, existe una sobrepoblación de 18.06 por ciento.
Se reporta que 6 mil 622 están encarcelados por delitos del fuero común y 570 por delitos federales.
Por último, hay celdas en las que duermen varios internos, pero los personajes “vip” tienen estancias para ellos solos, aunque se pueden comunicar de celda a celda, verse en los pasillos del área o tomar el sol, en su oportunidad.
FOTO: Proceso
