"Los largos juicios con soluciones poco favorables han pasado a la historia. En la actualidad nuestra profesión exige un cambio de mentalidad, estudio constante, con responsabilidad, valores y ética; adoptándonos a las nuevas formas de impartir justicia y a las bondades de los métodos alternativos de solución de conflictos. Hay que dejar atrás la idea de que metiendo a la cárcel a los infractores tienen un castigo", expresó la jueza del Poder Judicial del estado, María de Lourdes Hernández Enríquez.
Con 22 años de servicio en la institución, la egresada de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, UABJO, y galardonada con el premio al mérito judicial 2016, indicó que esta época de grandes retos y exigencias múltiples lleva a los juzgadores a ver más allá de los hechos planteados por la partes y poner especial cuidado en la protección de los derechos de las personas indígenas y de los grupos vulnerables, como son las mujeres y niños.
"Apartarnos de la rigidez de antaño"
“El abogado de ahora tiene nuevas formas de aplicar el derecho, lo cual nos lleva a apartarnos de la rigidez de antaño, a nuevos retos, a desarrollar nuestras habilidades, buscar la prontitud, resolver con otra visión, conscientes de la misión y responsabilidad que nos tocó vivir", puntualizó la jueza tercera de lo familiar del Distrito Judicial del Centro, al exhortar a quienes tienen esta responsabilidad, a buscar la solución más justa, valorando las circunstancias particulares de cada caso.
"Son muchos los cambios que antes eran inimaginables, ya que a partir de la reforma constitucional en materia de derechos humanos, la conducta de un abogado o de un juez no es la misma de antes. Tenemos ante nosotros un nuevo paradigma, una nueva visión del derecho, en la cual los sistemas tradicionales han resultado obsoletos", manifestó.
Fomentar el SJPA
Asimismo, la juzgadora, quién antes se desempeñó como ejecutora y secretaria judicial en diferentes juzgados de la entidad, indicó que también es necesario promover un cambio en el pensamiento de las futuras generaciones de abogados y fomentar en ellos los beneficios que el Sistema de Justicia Penal Acusatorio ofrece.
Destacó que muchos de los problemas que surgen hoy en día, son debido a la falta de comunicación, lo cual lleva a las personas a cerrarse totalmente, a no tratar de resolverlos de manera coordinada, sino tomar una actitud pasiva, sin soluciones y esperar a que un juez resuelva el conflicto. "El juez no es un esclavo de la ley, ésta es sólo un instrumento para hacer justicia", señaló.
Por otra parte, resaltó que haber sido distinguida con el premio al mérito judicial es grato y reconfortante ya que desempeñarse como jueza le ha implicado que su deber jurisdiccional esté por encima de su familia.
