Israel García Reyes
Medios canadienses publicaron que la empresa aérea Air Canada ha suspendido a más de 800 empleados por no tener una vacuna COVID-19 completa de acuerdo con las reglas federales recientemente aprobadas en ese país.
A su vez, Michael Russo, director ejecutivo de esta compañía dijo el martes que la gran mayoría de los 27,000 tripulantes de cabina, agentes de servicio al cliente y otros recibieron las dos vacunas:
“Nuestros empleados han hecho su parte, con más del 96 por ciento de ellos ahora completamente vacunados. Los empleados que no fueron vacunados o que no tienen una exención médica u otra exención permitida han sido puestos en licencia sin goce de sueldo”, dijo en conferencia telefónica.
En tanto el portavoz Peter Fitzpatrick dijo en un correo electrónico que los despidos “tienen lugar en toda la empresa”.
La compañía también señaló en un correo electrónico que las proporciones están en línea con las de WestJet Airlines Ltd. donde menos del cuatro por ciento de los trabajadores – menos de 300 de los 7.300 – no están vacunados actualmente.
La ley exige la vacunación obligatoria para los trabajadores federales, pero dicho precedente empieza a extenderse al sector privado, lo que repercutiría en el despido de miles de trabajadores en el país de América del Norte.
Se sabe que empresarios canadienses han comenzado a prescindir de empleados que no presentan un certificado de vacunación contra COVID-19 pese a la escasez de mano de obra, bien mediante un despido o concediendo excedencias sin empleo y sueldo respectivos.
Cabe recordar que el primer ministro Justin Trudeau anunció el mes pasado que a partir del 30 de octubre, Ottawa exigirá que las aerolíneas, las compañías ferroviarias y de carga reguladas por el gobierno federal implementen políticas de vacunación obligatorias para los empleados con el fin de evitar contagios.
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