El Heraldo
En un hecho histórico, la sonda espacial Parker Solar Probe de la NASA logró "tocar" por primera vez el sol. La nave, que voló a través de la atmósfera de la estrella, logró tomar muestras de partículas y campos magnéticos.
Esto es un hito en la historia de la astronáutica y, de acuerdo con la agencia espacial estadounidense, "un gran salto en la ciencia solar". Expertos consideran que esto es un acontecimiento incluso más importante que la llegada del ser humano a la luna, aunque sea menos sonado, pues ayudará a descifrar los misterios detrás de este astro y su influencia en nuestro sistema planetario.
En un comunicado emitido este martes, Thomas Zurbuchen, administrador asociado de la Dirección de Misiones Científicas en la sede de la NASA, dijo que "es un momento monumental para la ciencia solar y una hazaña verdaderamente notable. "Este hito no sólo nos proporciona conocimientos más profundos sobre la evolución de nuestro Sol y sus impactos en nuestro sistema solar, sino que todo lo que aprendemos sobre nuestra propia estrella también nos enseña más sobre las estrellas del resto del universo".
¿Qué es la sonda solar Parker Solar Probe?
Esta unidad fue lanzada en 2018; estaba programada para que durante siete años llegara a la máxima distancia posible: 6 millones de kilómetros, para entrar y salir rápidamente, para realizar mediciones del entorno solar con un conjunto de instrumentos desplegados detrás de un grueso escudo térmico.
Sin embargo, el 28 de abril pasado, Parker cruzó el límite crítico de Alfvén, el borde exterior de la corona, que es el punto en el que el material solar que normalmente está unido al Sol por la gravedad y las fuerzas magnéticas, se libera para salir al espacio. Eso es unos 13 millones de kilómetros por encima de la superficie visible
