Pasar al contenido principal
x

Inspira provincia sus letras

Foto(s): Cortesía
Agencia Reforma

CIUDAD DE MÉXICO.- A Selva Almada le gusta construir sus historias como si fueran rompecabezas. En su libro El desapego es una manera de querernos incluye tres conjuntos de relatos: "Niños", "Chicas lindas" y "En familia", que pueden leerse de manera independiente, pero al final forman una unidad.


"Siempre pienso en mis textos como si fueras en un auto y, al mirar por la ventanilla, vieras una escena", explica la escritora argentina en entrevista. "Es ese fragmento que la velocidad te permite ver, como espiar un minuto o unas pocas horas en la vida de los personajes".


Como Denis, que se pega un tiro sin que nadie de su familia entienda el porqué, o Andrea,  apuñalada en el corazón mientras duerme en su cama. Son relatos que transcurren en su provincia natal, Entre Ríos, "un lugar lleno de arroyos, pájaros y colores lindos".


"Me interesan los libros donde hay zonas oscuras que el lector puede llenar con su propia experiencia", indica Almada. "Me gusta que mis propios textos guarden misterios para mí".


Sus influencias son autores como Raymond Carver y John Cheever. Escribe relatos sin finales sorpresivos, historias que se van "desintegrando", como los cuentos dispersos que cierran el volumen, que pueden concluir con un beso o una carcajada: "En algún momento se terminan, pero podrían seguir".


El desapego... (Random House Mondadori) rescata sus primeros cuentos, publicados en editoriales de escasa circulación. Con su primera novela, El viento que arrasa (2012), Almada llamó la atención de los lectores y de la crítica, un camino ascendente que refrendó con Ladrilleros y las crónicas de Chicas muertas.


"Argentina es un país centralista, donde lo que no pasa por Buenos Aires no existe", señala. Hay una tradición de literatura de provincia que cuenta con grandes escritores como Juan José Saer y Daniel Moyano, precisa, que no alcanzaron la fama de autores más urbanos como Borges o Cortázar.


Para publicar sus libros "provincianos", Almada se mudó a la capital del país. "Las personas que nacimos y fuimos criadas en el interior tenemos una percepción del mundo diferente, ritmos distintos, más pausados", explica.


Preocupada por la oralidad, es una autora que al comenzar una historia nunca sabe qué pasará, centrada en temáticas clásicas como el amor, la muerte y la familia.


"Creo que la literatura urbana está más encerrada en sí misma, en los problemas del ciudadano, y en mis historias, quizá los personajes sean introvertidos, pero se mueven en un paisaje donde el cielo es más amplio y la tierra más ancha. Siempre hay una interacción entre el adentro y el afuera".


ASÍ LO DIJO


"La literatura urbana está más encerrada en sí misma, en los problemas del ciudadano, y en mis historias, quizá los personajes sean introvertidos, pero se mueven en un paisaje donde el cielo es más amplio y la tierra más ancha. Siempre hay una interacción entre el adentro y el afuera".


Selva Almada, escritora

Noticias ¡Cerca de ti!

Conoce los servicios publicitarios que impulsarán tu marca a otro nivel.