Oaxaca.- En Oaxaca hay 82 mil 303 infantes en educación preescolar y secundaría que no acuden a la escuela, principalmente por pobreza y problemas familiares, así lo señala el Instituto Nacional de Evaluación para la Educación (INEE).
En el reporte Identificación de subpoblaciones de niños que no asisten a la escuela y caracterización de los factores asociados a la problemática se reconoce que: “Aún falta mucho por hacer para universalizar el acceso de los más pequeños y de los de mayor edad del país”.
Los datos sobre la población infantil son contundentes en cuanto a la cantidad de menores que en pleno siglo 21 no asisten a la escuela. En este sentido, el Informe del INEE 2014 precisa que en México en números absolutos, poco menos de 4.8 millones de niños de entre 3 y 4 años y entre 13 a 17 años no se inscribieron a la escuela; de ellos casi la mitad tenía 3 o 17 años de edad.
A nivel local, hasta el ciclo escolar 2014-2015 solamente la educación primaria registraba una cobertura del 100.1 por ciento, con una matricula de 532 mil 635 infantes distribuidos en cinco mil 524 instituciones públicas.
El problema inicia, según demuestran las cifras del INEE en la educación inicial, donde en Oaxaca se contabiliza un 82.5 por ciento de cobertura, quedando sin posibilidades de estudiar 33 mil 228 infantes.
En un extremo se encuentran los 49 mil 75 adolescentes que no cursan la secundaria, cuya cobertura a nivel estatal es del 78 por ciento.
La Unicef atribuye los factores de inasistencia de escolares a las aulas principalmente por la carencia de escuela o dificultad para acceder a ella por su ubicación, el rezago social y pobreza, la rigidez en las disposiciones administrativas, la falta o la inadecuada distribución de recursos destinados a infraestructura, desinterés en la escuela y el ausentismo de los profesores.
El organismo internacional también señala al maltrato infantil y a la discriminación como una situación que desincentiva la asistencia escolar.
Para el Instituto Nacional de la Evaluación para la Educación (INEE), desde cualquier punto de vista, es alarmante la existencia de menores que no puedan asistir a la escuela o que no cuenten con las condiciones y recursos que les permitan hacerlo, ya sea porque en su colonia o comunidad se carezca de las escuelas necesarias para que asistan o, si las hay, debido a que sus docentes y directivos no cuentan con la formación, la ética y la vocación indispensables para atenderlos con calidad. Así, el derecho a la educación no se cumple, y con ello se cancela el goce de prácticamente todos los demás derechos.
