Oaxaca.- Transportistas agremiados al Sindicato Libertad marcharon ayer desde tres puntos distintos rumbo al centro de la ciudad para exigir libertad de sus compañeros, a quienes consideran “presos políticos”, y el esclarecimiento de los homicidios en contra de sus dirigentes.
La concentración previa sobre la Carretera Internacional Cristóbal Colón, en inmediaciones del llamado columpio de Ixcotel en el oriente de la capital de Oaxaca, y en Santa Rosa Panzacola, en la zona poniente, así como en la avenida Símbolos Patrios, y el traslado de los manifestantes por diferentes avenidas, provocaron grandes congestionamientos vehiculares porque durante la movilización los contingentes fueron escoltados por decenas de mototaxis, taxis de municipios conurbados, volteos y pipas, agremiados a esa organización y que han puesto en jaque a diversas colonias citadinas.
En algunos de los cruceros por los que transitó la marcha, los choferes de las unidades se hicieron de palabras con conductores de autos particulares quienes pretendían pasar con la luz verde del semáforo en busca de liberarse de los embotellamientos.
A su llegada al centro histórico, los transportistas –quienes recibieron también el respaldo de comerciantes ambulantes–, se congregaron en los alrededores del zócalo; ahí realizaron un mitin en espera de una mesa de diálogo con funcionarios del gobierno estatal.
Una de las protestas fue encabezada por el sacerdote católico Raúl Eguía Hernández, representante del líder nacional de la gremial, Hugo Bello, quien se definió como “mentor espiritual del sindicato”.
El presbítero franciscano, sostuvo que el Sindicato Libertad salió a las calles en forma pacífica para demandar justicia y en demanda de que sean liberados el dirigente Erik Giovanni Luis Villaseca, así como sus otros compañeros Alejandro Martínez Juárez y José Luis Méndez, quienes cumplen un año en la cárcel “sin sustento jurídico alguno”.
Subrayó que la protesta también fue convocada para reclamar el esclarecimiento y el castigo a los autores intelectuales y materiales de los crímenes de sus líderes Carlos Alberto Luis López, Armando Luis Martínez, Germán Hernández Juárez y Ezequiel Castillo Cruz.
“Queremos justicia; que sean excarcelados nuestros compañeros y que se sancione a los asesinos”, requirió.
Destacó que las movilizaciones del Sindicato Libertad constituye un testimonio de su fuerza para exigir justicia, pero también de su interés por participar en el progreso y desarrollo de Oaxaca.
“Queremos ese apoyo del gobierno porque estamos dispuestos a sumarnos a sus proyectos en los municipios, en las comunidades y en las colonias”, recalcó.
El representante del dirigente nacional dijo que decidió acudir a Oaxaca para respaldar a la gremial para transmitir los valores de su organización Hermano y Libertad, donde se promueven los derechos y la justicia.
“Queremos animar a los compañeros a que, como transportistas, defiendan sus derechos, que sientan que no están solos sino acompañados, pero sin caer en la violencia”,
Sacerdote de siete leguas
Según sus declaraciones a la prensa, Fray Raúl Eguía Hernández se desempeña en un templo de Coyoacán, en la Ciudad de México, aunque conforme al Directorio de Ministros de Culto de la Secretaría de Gobernación, el sacerdote –perteneciente a la Provincia Franciscana del Santo Evangelio de México–, se encuentra asignado en la parroquia de San Juan Bautista, Huajintepec, Guerrero. Anteriormente, ejerció el ministerior en el templo de San José de Gracia en Orizaba, Veracruz.
