Los olores, sabores y algarabía de la vendimia del mercado Sánchez Pascuas, en la zona centro de la ciudad, ahora está en calles y plazuela que da a la calle Porfirio Díaz. El interior del inmueble, trás 45 años de inaugurado, es remodelado y los locatarios se vieron obligados a abandonar el edificio de manera temporal.
El 19 de septiembre de 1972 el mercado del Carmen Alto se mudaba, no muy lejos, a unas cuantas cuadra hacia el norte, entre las calles Porfirio Díaz y Tinoco y Palacios. Desde entonces se llama Sánchez Pascuas, en honor al arquitecto que diseñó el primer alcantarillado del primer cuadro de la ciudad de Oaxaca.
En aquel entonces, el inmueble fue inaugurado. Durante 42 años nunca tuvo una remodelación y envejeció junto a sus locatarios y visitantes.
Pedía a gritos una renovación, que finalmente llegó. Hace tres años renovaron el techo, ahora se renuevan las instalaciones eléctricas, las hidráulicas, el abasto de agua, el drenaje y los pisos. Además, se construye una rampa para personas discapacitadas.
Marcos Calvo Gómez, secretario general de la Unión de Expendedores del mercado Sánchez Pascuas, señaló que se encuentran en la segunda parte de la remodelación del mercado, "la primera consistió en reparar los techos y el alumbrado y ahora se arreglan los cables de energía eléctrica, además del agua potable y los pisos; en la tercera etapa se renovará el área de cocinas".
Antes de Año Nuevo
El dirigente indicó que se planea que el 31 de diciembre el inmueble se encuentre totalmente listo,"la segunda etapa la entregaron a tiempo, así que estamos confiados de que se cumplan los plazos establecidos".
Los recursos que se utilizan son federales, en la primera etapa se consiguieron gracias a la intervención del municipio, y ahora se contó con el apoyo del gobierno estatal.
Los baños por ahora tienen que compartirse entre hombres y mujeres. FOTO: Mario Jiménez
Retraso de 15 días
Los sindicatos los alcanzaron, pues Calvo Gómez destacó que hubo conflictos con integrantes de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), quienes exigían los trabajos de la obra, "pero qué chamba, sí sólo salen dos o tres carros de escombro".
Posteriormente, fueron los integrantes del Sindicato Libertad los que pararon las labores, "les quitaron las herramientas a los compañeros que construyen", en algún momento pretendieron ponerse al tú por tú con los transportistas, pero se llegó a la conclusión que "estos sindicatos no entienden de razones y no respetan a nadie".
Problemas en la parte de afuera no faltan
El principal problema que locatarios y compradores han enfrentado al estar ubicados en la plazuela es la inseguridad, pues aunque hay veladores,han sido víctimas de algunos artículos de los locales. "El administrador, David Domínguez, no hace su chamba, no está cuando lo necesitamos", subraya Calvo Gómez.
Además, deben lidiar con la cerrazón de la policía vial cuyos agentes retiran las placas a los vehículos de los clientes, a pesar de que habían llegado a un acuerdo con el municipio, para que, por lo menos, mientras se realizan los trabajos permitiera el estacionamiento.
El tradicional mercado recibe una necesaria remodelación. FOTO: Mario Jiménez
Las ventas en la plaza no son malas
"Un buen comerciante tiene que buscarle, cuando las cosas van bien nadie dice nada. Ahora todos estamos parejos y la verdad, si estamos vendiendo", reconoce el dirigente de los locatarios del mercado Sánchez Pascuas.
"En ocasiones aquí afuera se vende más, pues funcionamos como tianguis, a muchas personas, cuando pasan se les antoja y compran", afirma Calvo Gómez.
Domingo, el mejor día
El domingo los locatarios del Sánchez Pascuas reciben la visita de miles de personas, opina el comerciante, además de que también arriban personas de la sierra a ofrecer sus productos, por lo que la vendimia es más atractiva.
El queso de Etla, el quesillo, la carne de cerdo y la barbacoa de Tlacolula son los productos más solicitados el domingo.
El mercado atiende principalmente a las colonias Figueroa, El Fortín, Barrio de Xochimilco y parte del Centro, "espero que la gente nos visite, tenemos todo lo necesario y ofrecemos cosas frescas y ricas, este es un mercado muy tranquilo, diferente a los otros", finaliza el líder de los locatarios.
En el área de cocinas bajan ventas
Lupita Buenrostro lleva trabajando 30 áreas en el área de cocinas del mercado Sánchez Pascuas, tiene una juguería, y resalta que ellos si les afectó en las ventas la remodelación del inmueble.
"Nos afectó porque nos separaron, nosotros estamos de lado de la calle Tinoco y Palacios y la mayor parte está del otro lado, las personas cuando vienen a comprar, pues ya no vienen para acá, y eso nos ha pegado, nos debieron sacar a todos".
No a la Plazuela del Carmen
La remodelación del Sánchez Pascuas obligó a un momentáneo traslado. FOTO: Mario Jiménez
-¿Qué va a querer muñeca?
-Pero de trapo.
-Pero muñeca al fin.
Una señora de edad avanzada charla con una amplia sonrisa con el carnicero, quien con cuchillo en mano no tiene piedad de la carne.
"Este es el mercado más importante por que gran cantidad de turistas nos visitan, además, se surten a los restauranteros", destaca el hombre que no deja de atender a sus clientes en su improvisado puesto que se ubica en la plazuela a un lado de la calle Porfirio Díaz.
"Este mercado no está contaminado, pero corre el riesgo de estarlo, pues el administrador, David Domínguez, con el director de mercados, Humberto Contreras, quieren imponer a uno de los suyos como secretario general", afirma.
Se mete tanto en sus declaraciones que se olvida por un momento de sus clientes, quienes se le amontonan.
"Por ahí pregonan que ya están ofreciendo puestos", el comerciante asegura que quieren convertir en tianguis la plazuela del Carmen, lo que a decir de sus palabras, "acabaría con la tranquilidad del mercado y de los vecinos de los alrededores.
Desde la fundación
Teresita lleva los 45 años vendiendo en el mercado Sánchez Pascua, tenía ocho en el Carmen Alto. FOTO: Mario Jiménez
El olor es exquisito, ese aroma a acompañado al Mercado Sánchez Pascuas desde que existe, inclusive desde antes.
Teresita fue testigo de la migración de los comerciantes que vendían en el Mercado del Carmen, al inmueble que ocupan ahora, el cual es remodelado.
¿Usted llegó cuando era de palitos aquí?
-De palitos. No, aquí hace 45 años llegamos al mercado nuevo.
Teresita tiene un local de comida, en donde ofrece estofado, mole, caldo de pollo, amarillo, tacos dorados y mucho más.
A pesar de que la afluencia de la gente no es tanta como solía serlo debido a la remodelación, ella no pierde la sonrisa.
"En unos días nos vamos a la plazuela, espero que no nos visiten y no nos abandonen como ahora", señala Teresita.
