El físico alemán Albert Einstein aseveró que el tiempo es relativo, y en el Congreso del Estado su teoría se confirma. A pesar de que los citatorios determinan una hora para iniciar las sesiones, los diputados disponen del tiempo a su antojo. Una, dos, tres y hasta cuatro horas son para ellos apenas unos simples instantes. Lo peor, disponen de una hora para discutir un tema y, al final, nadie entiende lo acordado.
Salón del pleno:15:15 horas
Se reanuda el cuarto periodo extraordinario de la 63 legislatura, para el que se citó a las 12:00 horas, con el único asunto de aprobar la lista propuesta por la Junta de Coordinación Política (Jucopo), a fin de que el gobernador del estado seleccione una terna que propondrá a los diputados, para elegir a los fiscales especializados en materia de delitos electorales y combate a la corrupción.
Los secretarios leen la lista, los diputados aprueban la misma y se decreta otro receso hasta que el gobernador envíe las ternas, para lo cual tiene un plazo de 24 horas.
La presidenta de la mesa directiva, Neli Espinosa Santiago, solicita a los diputados no abandonar sus curules, con el propósito de iniciar, lo antes posible, el quinto periodo extraordinario de sesiones.
Salón del pleno: 15:30 horas
El presidente de la Comisión de Turismo, Javier Velázquez Guzmán, y sus asesores acuden a la curul de la coordinadora de la fracción parlamentaria del PRI, María de las Nieves García Fernández, para convenir el asunto de un exhorto para que se apoye a los pueblos mágicos de Oaxaca.
El diálogo es extenso y al mismo se suman los diputados Luis Antonio Ramírez Pineda, Manuel León Sánchez y otros más. El hijo del ex gobernador Heladio Ramírez López se explaya en su explicación. 20, 30, 40, 50 y hasta 60 minutos.
Por fin, luego de una larga llamada telefónica y otra plática con los asesores, se instruye al oficial mayor, Igmar Francisco Medina Matus, que indique a la presidenta de la mesa el inicio del quinto periodo extraordinario.
Salón del Pleno: 16:35 horas
Inicia el quinto periodo extraordinario. Se lee el decreto respectivo, el orden del día y se desahoga en minutos los primeros asuntos: la designación de autoridades municipales, por diversos motivos.
A continuación se somete a votación el exhorto para que se otorguen recursos a los pueblos mágicos de la entidad. La secretaria lee el dictamen con proyecto de acuerdo: se exhorta al titular del poder Ejecutivo del estado para efecto de que se realicen las adecuaciones necesarias en el Presupuesto de Egresos del presente ejercicio fiscal para destinar recursos a los pueblos mágicos de San Pedro y San Pablo Teposcolula, Huautla de Jiménez, Calpulálpan de Méndez y San Pablo Villa de Mitla…
-“¡Presidenta!, esa no es el acuerdo que tomamos, lo que convenimos es que el exhorto se debe hacer al gobierno federal…” Señala la coordinadora priísta desde su curul.
-“Solo quiero subrayar que de acuerdo a la normatividad estatal, es el Gobierno del Estado quien debe apoyar a los pueblos mágicos”, señala el diputado perredista Toribio Sánchez López.
Los legisladores se muestran desorientados. Velázquez Guzmán externa su apoyo a la legisladora priísta.
María de las Nieves pide que se vote su propuesta. Los diputados presentes se levantan de sus curules y a coro exigen: “¡que regrese a comisiones, que regrese a comisiones”.
Ante la confusión, la presidenta de la mesa directiva somete a votación regresar el dictamen a comisiones y votar después el dictamen. La propuesta se aprueba y los legisladores abandonan el salón.
El tiempo es relativo, afirmó Einstein, y en el Congreso… simplemente ocioso.