Porque la figura de administrador municipal es lo equivalente a la institucionalización de la corrupción y del enriquecimiento ilícito, debe desaparecer, señaló ayer Isidoro Yescas Martinez, investigador del Instituto de Investigaciones Sociológicas de la UABJO.
La designación de administrador municipal, debe desaparecer en nuestra entidad, porque ofende la inteligencia de las comunidades, al ser una imposición nuevamente del Poder a Ejecutivo, además de carecer de instrumentos legales para transparentar el manejo de los recursos públicos etiquetados para el desarrollo del municipio a su cargo, señaló.
Hoy, con "luz verde" de la Cámara de Diputados, la permanencia del administrador municipal en un municipio, en lugar de tres meses que como máximo para preparar condiciones para una segunda elección municipal, se convierte en tres años y hasta tres trienios como ocurre con el priista Dámaso Nicolás Martinez Ramírez, quien ha ocupado el cargo en San Raymundo Jalpam, Tanetze de Zaragoza y hasta el 31 de diciembre en San Luis Amatlán.
Definitivamente, ello resulta ofensivo a la inteligencia de los ciudadanos oaxaqueños, agregó.
Las administraciones municipales son una especie de tutela del gobierno estatal para que sus titulares dividan a los municipios, sobornen a los dirigentes regionales y tejan redes de complicidades con funcionarios de la Secretaria General de Gobierno, a cambio de permanecer en sus cargos.
Históricamente, los administradores municipales son personajes carentes de valores morales que solo les interesa enriquecerse del cargo y trabajar en complicidad con quien los designó, en este caso el Secretario General de gobierno, expuso en entrevista.
En sus reflexiones, Isidoro Yescas añadió que hoy vemos que la mayoría, por no decir la totalidad de los primeros administradores nombrados, no solo son priistas, sino afines a los intereses del Secretario general de gobierno, Alejandro Avilés Álvarez.
Para el investigador del IISUABJO, los administradores municipales no abonan a la estabilidad y paz de los municipios a su cargo. Por el contrario, mediante la división y el soborno alteran la armonía de las comunidades.
En opinión de Isidoro Yescas Martinez, debe recuperarse bajo nuevas normas, la figura de Consejos Municipales, pero cuidando que no resulte una imposición del Poder Ejecutivo, sino una decisión colegiada de las comunidades en tanto se generan condiciones para una elección municipal extraordinaria.
Opacidad
17 administradores irían a municipios con líos electorales
5 con antecedentes de presuntas anomalías
