CIUDAD DE MÉXICO.- Es amante de la moda y el lujo, y acaba de lanzar una línea de ropa infantil en la que figuran prendas con incrustaciones de perlas que llegan a costar 7 mil dólares.
Su nombre es Diora Usmanova, aunque ahora es más conocida como la "María Antonieta de Uzbekistán" debido a su falta de sensibilidad ante la pobreza en la que viven sus connacionales, mientras que ella está más preocupada por diseñar ropa de alta costura para niños.
A primera vista, no hay nada censurable en el hecho de que una mujer emprenda un negocio, por más excéntrico que parezca.
Pero resulta que Diora es sobrina de Shavkat Mirziyoyev, Primer Ministro de Ubezkistán y mano derecha del Presidente Islam Karimov, un dictador conocido por su costumbre de hervir en aceite a sus enemigos políticos.
Con esos antecedentes familiares, cobra sentido la indignación, pues los 7 mil dólares que cuesta un vestido infantil de su marca Bibione Haute Couture equivalen al salario mínimo anual de unos 13 trabajadores uzbekos.
Diora se casó en 2009 con Babur Usmanov, a quien Alisher Usmanov, el segundo hombre más rico de Gran Bretaña y socio del Arsenal Futbol Club, consideraba como el hijo que nunca tuvo.
Tras repentina muerte de Babur, en 2013 en un accidente automovilístico, la joven y su hija, Mariyam, quedaron bajo el amparo de su familia política.
Y fue precisamente su pequeña quien la inspiró a crear su propia línea de ropa infantil, pues no estaba conforme con las prendas que tenía en su guardarropa.
"Siempre la había vestido con ropa de Bonpoint (marca francesa), pero un día la llevé a una fiesta y, tras unos minutos, me dijo que quería irse. Le pregunté la razón y me respondió: "Mamá, no tengo un vestido hermoso'.
"Imagínate, apenas tenía 2 años, acababa de empezar a hablar, pero ya le incomodaba no tener un outfit bonito", contó la diseñadora recientemente a la edición rusa de la revista Tatler.
Con semejantes prioridades en la vida, no es de sorprender que sus connacionales la tachen de inmoral, hipócrita y falta de responsabilidad social, pues mientras ella muestra con descaro su opulencia a sus seguidores de las redes sociales, la gran mayoría vive en la pobreza.
Sin embargo, las únicas críticas que verdaderamente le molestan son las que se refieren a su carrera como diseñadora. Por eso, detesta que la llamen "la sobrina" o "la viuda del sobrino", pues no desea que los nombres de sus influyentes familiares opaquen sus logros.
"Si leyera que 'la hija de alguien importante' creó una línea de lujo, hasta yo pensaría que de seguro ella no hizo nada y que contrató a una diseñadora para que realizara todo el trabajo", se quejó.
Porque Diora tiene en mente una meta bien definida: que los pequeños en Moscú, donde reside, luzcan como todos unos aristócratas modernos.
"Espero que llegue el día en que los niños acudan a las fiestas vestidos con atuendos de alta costura y no con simples pañaleros", dijo a Tatler.
CONÓCELA
- La joven, de 27 años, no se considera una mujer femenina.
- Pese a la fortuna que tiene no utiliza los servicios de un stylist. Se viste según su estado de ánimo.
- En su cuenta de Instagram publica poemas escritos a mano. Su favorito es Pushkin.
- Moscú es su ciudad favorita, aunque también le gusta Israel.
- "Le Grand Baazar", en Moscú; "Montagne" y "Le Suit", en París; son tiendas que recomienda.
- Su madre, Sayora Khashimova, es diseñadora y le ayuda con los diseños de su línea de ropa.
- A París y Zug, Suiza, las considera ciudades aburridas en las que no hay nada que hacer.
