Puerto Escondido, Oaxaca.- Concluyó con broche de oro el ciclo de invierno del Programa Junior Salvavidas, en el que cientos de niños y jóvenes realizaron las pruebas más fuertes, como son bodysurf, bodyboard, surf, remada, snorkel, rapel, ciclismo, salto desde embarcación y la clásica triatlón, en las playas Marinero, Manzanillo y Zicatela.
“Siempre nos acoplamos a las condiciones del mar, nos tocaba remada, pero no se pudo por el alto oleaje, inclusive la actividad de snorkel tampoco se pudo al cien por ciento. La playa de Carrizalillo no está apta, tenemos oleaje, en Marinero está fuerte el oleaje y aquí, que es la más tranquila, Manzanillo, también presenta un poco de movimiento de agua”, explicó el director del programa y salvavidas de estado, Godofredo Vásquez Bohorquez.
En esta temporada 130 aspirantes a juniors lograron llegar a la triatlón, organizados en cuatro categorías por edades: 7 a 9; 10 a 11; 12 a 14 y 15 a 17 años, recorrieron en bicicleta distancias desde uno hasta cuatro kilómetros; corrieron 800 metros, un kilómetro y medio hasta dos kilómetros.
“Entraron como 200 niños, ahora quedan unos 120, por eso les grita el monitor, ¿quiénes terminan el programa Junior Salvavidas?, y ellos gritan, ¡los mejores!, van desertando, unos porque no aguantan el ritmo que traemos y otros por faltas”, observó el director del Junior.
En este curso gratuito, que lleva más de diez años vigente, niños y jóvenes realizan entrenamiento físico, practican deportes acuáticos, técnicas de primeros auxilios y rescates en el mar, además cicletadas de hasta 14 kilómetros, campamento y concurso de esculturas de arena que contribuyen a fomentar el sentido de responsabilidad, superación y trabajo en equipo.
Los padres de familia lo apoyan por ser una herramienta valiosa. “Lo más importante en la vida es saber nadar, también están aprendiendo rescates, a poder ayudar a otra persona, todos los días levantándose bien temprano, siempre cumplidos, no hemos fallado en ningún curso, mi hijo lleva 14, le ponemos empeño porque los hijos se crían responsables”, opinó un vecino de la colonia Marinero que acompaña a dos de sus hijos al Junior Salvavidas.
Godofredo junto a diez monitores guían a niñas y niños de 7 hasta 17 años, los fines de semana, unas dos horas, durante tres meses. Las primeras actividades consisten en valorar el estado y nivel de los participantes para ubicarlos en grupos de trabajo según un color específico: código rojo “para los que no saben nadar muy bien”; amarillo “se defienden” y verde “son los peces, los delfines”, explicó el salvavidas estatal.
El próximo módulo del año arrancará el primer sábado de julio. Como es natural, ya cuenta con interesados.
