Víctor Hugo Villanueva
Después de alcanzar a Eduardo Díaz y Marlon Yair Jiménez, el pedalista Andrés Yael Canseco se dio a la fuga en el ascenso a la Sierra Juárez, para llegar en solitario a la meta en la alta montaña.
Más de 60 participaron en la primera carrera dominical del año convocada por la Asociación de Ciclismo de sus 8 Regiones de Oaxaca, con la que se abrió el serial denominado Mole y Chocolate Juquilita.
La competencia constó de aproximadamente 72 kilómetros, con salida en el Monumento a Juárez para rodar sobre la carretera internacional 190 hasta Tlacolula de Matamoros, en donde retornaron y al llegar al crucero del Monumento a Juárez viraron para tomar la carretera 175 e iniciar el ascenso a la Sierra Juárez, hasta llegar a la meta en el paraje El Pasajuego.
El pelotón de ciclistas prácticamente rodó compacto durante la ida a Tlacolula de Matamoros. Y al regreso, a la altura de la población de Macuilxóchitl se dieron a la fuga Eduardo Díaz y el juchiteco Marlon Yair Jiménez, quienes rompieron el grupo.
Atrás, comenzó a trabajar Diego Jiménez con Andrés Yair Canseco para alcanzar a los fugados. Fue ya en el ascenso a la Sierra Juárez, a la altura de lo que es conocido como la primera vidriosa, que lograron darle alcance a Eduardo Díaz y Marlon Yair Jiménez.
El pedalista Andrés Yair Canseco mantuvo el ritmo de su pedaleo y se escapó en solitario para quedarse con el primer lugar absoluto de la primera carrera ciclista dominical del año, en la que registró un tiempo de una hora con 51 minutos y 28 segundos. Sacó una ventaja de tres minutos con diecisiete segundos sobre su más cercano perseguidor en la categoría élite, Héctor Campos, para hacer el 1-2 para el equipo Barro Jaguar.
Al término de la competencia se repartió una bolsa de premiación de cinco mil pesos entre los ciclistas que ocuparon los primeros lugares en cada categoría.
