La Selección Mexicana sub 23 dominó a Brasil en la semifinal de los Juegos Panamericanos 2023, pero un autogol al minuto dos le costó el partido, y con la derrota por 1-0, y jugará contra Estados Unidos por el bronce.
La Verdeamarela no honró su historia porque renunció a la posesión de balón, porque sus futbolistas consumieron tiempo de forma reiterada y salieron victoriosos, en Viña del Mar, porque él travesaño o el portero jugaron a su favor.
Brasil jugó al contragolpe, a los trazos largos hacia el veloz Marquinhos, quien escapó por el sector derecho y mandó un centro relativamente sencillo para el guardameta Fernando Tapia, pero se le escurrió la pelota y rebotó en el defensa Antonio Leone, para el autogol que reforzó la propuesta de Brasil.
Y es que es raro ver a un representativo brasileño tirado atrás, cuyos jugadores caían como pinos de boliche a la menor provocación.
Brasil es finalista porque la fortuna jugó de su lado, y la falta de contundencia del Tricolor, como en aquel remate del central Rafael Fernández, ya sin portero, en el que la pelota pegó en el travesaño.
El equipo mexicano dio su mejor exhibición en estos Juegos Panamericanos, pero no le alcanzó. Incluso al 89' el propio Fernández remató de cabeza a segundo poste, pero el guardameta brasileño desvió el esférico cerca del poste izquierdo y después, claro, consumió segundos presumiblemente por una molestia física.
México enfrentará el sábado a Estados Unidos, en Viña del Mar, por el bronce.
El equipo Tricolor ha subido al podio de manera consecutiva desde 1991.
