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El lector furtivo: Corto Maltés, un capitán de la novela gráfica

ilustrador
Foto(s): Cortesía
Redacción

Rafael Alfonso

Hugo Pratt, nacido en Italia en 1927, tenía ascendencia inglesa y sefardí. Muy joven vivió los turbulentos años de la segunda guerra mundial, su abuelo materno, de origen sefardí- toledano, fue miembro fundador del partido fascista en Venecia, ciudad donde pasó su infancia. 

El padre (inglés de raíces francesas) vivió su juventud en Lyon y después llegó a Venecia, donde conoció a su esposa. Como trabajador de una dependencia italiana dedicada a la construcción de caminos llevó a su familia a Etiopía (entonces ocupada por Mussolini)  en donde les alcanzó el estallido de la Segunda Guerra Mundial.  Mientras el joven Hugo y su madre fueron evacuados a Europa, su padre fue capturado por los franceses y murió en un campo de prisioneros.

Hugo, de ideas más liberales, sirvió como intérprete para el ejército aliado. Inició sus pininos en el mundo de la historieta en Asso di Piche, un héroe enmascarado (co- creado con  Alberto Ongaro, Dino Battaglia y Mario Faustinelli) que luchaba contra una banda de criminales pro fascistas. 

Al finalizar la guerra, tuvo una estancia de diez años en Argentina donde maduró su trabajo, y tras dos años de estancia en Inglaterra volvió a Italia donde -después de trabajar en varios títulos propios y de otros autores- dio vida en 1967 a Corto Maltés, su personaje más célebre.

Corto Maltés emerge como un enigmático antihéroe lleno de carisma. Ambientada en los albores del siglo 20, la serie narra las peripecias de Corto, un marinero errante y cazador de tesoros, mientras navega por mares tumultuosos y recorre tierras exóticas. 

Influenciado por la iconografía estadounidense (Humprey Bogart o Clutch Cargo) puede considerarse también que prefigura a otros aventureros. Corto Maltés con su característico sombrero y cigarrillo, personifica la ambigüedad moral y la curiosidad intelectual.

La trama central de Corto Maltés se desarrolla en un mundo en constante cambio, como el que vivió el mismo autor, donde el protagonista se ve inmerso en acontecimientos históricos y políticos, como la Primera Guerra Mundial y la Revolución Rusa.

Pratt tejió una tela rica de historias interrelacionadas, profundizando en la psicología de los personajes y explorando cuestiones filosóficas de identidad, destino y moralidad. Corto Maltés es un caleidoscopio de influencias literarias, filosóficas y cinematográficas. 

Pratt se sumergió en el legado literario de autores como Joseph Conrad y Jack London, infundiendo su trabajo con resonancias de sus obras. Esta serie revela además las influencias de la filosofía existencialista y de movimientos como el boom latinoamericano

A su vez, la influencia de Corto Maltés en la novela gráfica es innegable. Pratt redefinió el género, mostrando que las viñetas podían trascender las fronteras entre el arte popular y el arte literario. Su enfoque en la narración densa y la representación detallada influyó en innumerables dibujantes y escritores posteriores. 

La profundidad de sus historias y personajes sirvió como un referente para aquellos que buscaban elevar la novela gráfica a nuevas alturas lo que llevó a su autor a ser aclamado como uno de los maestros del medio. Con un trasfondo multicultural y una curiosidad insaciable, Pratt supo infundir en Corto Maltés su propio espíritu aventurero.

 

 

“Corto Maltés se desarrolla en un mundo en constante cambio, como el que vivió el mismo autor”

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