Movido por la experiencia de participar en una muerteada, en 2019, Ramón Llaven decidió comenzar a trabajar en un documental en el que diferentes personas expusieran su experiencia al participar en esta tradición de Etla; no obstante, debido a la pandemia por la COVID-19, la idea dio un giro inesperado.
El documentalista, productor cinematográfico y audiovisual oaxaqueño, comparte que este trabajo en un principio se llamaría Flores en el Valle, pero durante las grabaciones se dio cuenta que las personas que había elegido estaban a la espera de poder volver salir a las calles.
Aunque desconoce si este será el nombre definitivo, el documental "La Espera" pretende retratar cómo un florista, un bailarín, una curandera y una habitante de Etla se preparan para las festividades del Día de Muertos en esa comunidad.
“Cada personaje está esperando algo y en la muerteada es cuando se une todo”, expone.
Asimismo, comparte que hay un personaje creado por la cámara, que también tiene un punto de vista sobre las muerteadas y de esta época.
Ramón relata que comenzó a escribir esta idea en 2019 y fue en 2020 cuando inició su búsqueda de laboratorios de escritura, pero fue hasta 2021 cuando aceptaron este proyecto en Chile.
Impulso para el documental
Agrega que llevó su proyecto para presentarlo y que lo apoyarán a terminar de desarrollar la historia, por lo que después consiguió apoyos para la producción de parte de programas en México, así como de las autoridades de la Villa de Etla.
Además, la Secretaría de las Culturas y Artes de Oaxaca y Ambulante, en coordinación con Netflix, lo apoyaron para comenzar a grabar la primera parte del rodaje, desde cómo es cada una de las vidas de los personajes, hasta días previos a la muerteada.
El documentalista menciona que actualmente está buscando financiamiento para terminar la última parte de este documental para de ahí comenzar con la post producción que consta del diseño sonoro, creación musical, edición, entre otros requisitos.
Por ello, finalmente destaca que esto se realizará durante el primer semestre del 2023, mientras que el segundo semestre espera comenzar a buscar lugares para proyectarlo y festivales nacionales y extranjeros para que más personas conozcan esta tradición oaxaqueña.
