Luego de conocer el triunfo del republicano Donald Trump como el presidente electo de los Estados Unidos, Sofía Cruz, la niña oaxaqueña que en septiembre de 2015 saltó las vallas de seguridad para entregarle una carta al Papa Francisco, durante la visita del pontífice a Whashington, pidió a la comunidad de migrantes mexicanos “No tener miedo a Trump y estar más unidos que nunca, porque como en todo hay que volver a empezar”.
El mensaje de Sofi fue compartido por sus papás a través de una llamada telefónica a la redacción de NOTICIAS, Voz e Imagen del Istmo, quienes ante la advertencia de Donald Trump de deportar a los indocumentados indicaron que: “Nunca nadie los podrá separar como familia”.
La pareja de oaxaqueños emigró en 2008 a los Ángeles, California; viven sin documentos, mientras que sus dos hijas cuentan con la doble nacionalidad, que les garantiza vivir libremente en Norteamérica.
Desde sus diferentes espacios, Sofía pidió el voto a favor de Hillary Clinton, y con ello proteger a las familias de los migrantes.
Zoila, la mamá de Sofía es originaria de la comunidad indígena chinanteca de El Rodeo Arroyo Pepesca, en el municipio de San Juan Bautista Tuxtepec, y su padre Raúl Cruz, es de Santiago Juxtlahuaca, de la región Mixteca.
El matrimonio reconoce – tristemente- que no esperaban que Donald Trump ganara la elección. “Nosotros como indocumentados no pensamos que esto pasaría, sentíamos el apoyo de todos los latinos, nos sentíamos unidos con otros, estábamos aliados para que ganara Hillary pero lamentablemente fue otra la decisión”, comentaron.
Y coincidieron que los resultados de las elecciones son graves para los 11 millones de indocumentados mexicanos que viven en Estados Unidos, pues corren el riesgo de ser deportados a México, y en algunos casos tener que abandonar a sus familias.
Tristeza migrante
Raúl Cruz, papá de Sofi, teme por los niños y jóvenes mexicanos que viven en ese país, y que al conocer la noticia sintieron una gran preocupación, miedo y tristeza. “No podemos ocultarles nada a los niños. Esto que está pasando no se puede dejar a un lado, es doloroso, triste… porque volvemos a empezar esta lucha de defendernos como migrantes”, indicó.
Para el oaxaqueño la tarea no va a ser fácil, pero seguirán luchando por los derechos de los migrantes, siempre con la esperanza de que se apruebe la reforma migratoria, y llegue el alivio a los indocumentados.
“Donde quiera que Sofi se pare o la inviten a participar habla de los migrantes y sus derechos, y eso es lo que siempre tenemos que hacer, buscar mayor apoyo de todos”, comentó.
El racismo
La mamá de Sofía reconoce que, con la victoria del republicano, se dio cuenta de la gran cantidad de personas racistas que habitan en Estados Unidos, “Es increíble lo que está pasando. Me duele la indiferencia de este país al que le hemos dado tanto. Yo sabía que había racistas pero no imaginaba en que cantidad”, manifestó.
“Estos resultados nos tienen que hacer más fuertes a todos los migrantes, porque no estamos solos. Hay temor pero nunca dejaremos de luchar”, reiteró.
Sofía se convirtió en una portavoz de los migrantes. Nació en Estados Unidos, habla español, inglés y chinanteco, lengua materna, de su madre. Los padres de Sofía participan con la Hermandad Mexicana, integrada por otras organizaciones como la Organización Regional de Oaxaca,(ORO), que buscan la reforma migratoria, en los Estados Unidos.
