Residentes de la calle de Díaz Ordaz, en el Centro Histórico de la ciudad, recalcaron las afectaciones que surgen en torno al crecimiento de la prostitución en la zona, lo que ha transformado el entorno de convivencia en el Barrio de la China.
Entre los afectados por esta situación se encuentra el señor Felipe Jorge Vázquez Vázquez, oriundo de la zona, quien indicó que la presencia de las sexoservidoras se marcó en esa calle desde hace cuatro años aproximadamente.
Para quienes viven en esta calle, se ha vuelto incómodo que los señalamientos sobre las casas y hoteles que funcionan como sitios donde se ejerce ese trabajo se generalice, por lo que indicó que los habitantes en el domicilio marcado con el número 802 se deslindan de dicha actividad.
El afectado recuerda que la prostitución en las calles que se aproximan al Periférico, cerca del mercado de abasto, se ha ido rotando con el paso de los años; sin embargo, desde 1950, esta actividad ya tenía presencia en la zona.
