LA CIÉNEGA, ZIMATLÁN, Oaxaca.- La llegada de Donald Trump a la Casa Blanca ha empezado a ocasionar inquietud y sobresalto en este municipio de los Valles Centrales, porque muchos de sus habitantes han migrado a los Estados Unidos.
No es para menos, pues además del creciente racismo, el amago de deportaciones masivas, así como dejar sin sustento a las familias, apartaría algunos padres de sus hijos, pues muchos de ellos ya cuentan con la ciudadanía estadunidense.
Racismo y esclavitud
“De por sí ya hay racismo, discriminación y esclavitud”, afirmó el presidente municipal Manuel Hernández Castellanos, conocedor del tema porque fue migrante y deportado, aunque con el paso de los años alcanzó la ciudadanía estadunidense.
El munícipe fue a los Estados Unidos como “mojado” en 1978, por la necesidad de contribuir a la economía familiar ante una dolencia de su padre, quien también junto con su abuelo, trabajaron en ese país.
Él, como otros mil habitantes de esta municipalidad, han migrado a ciudades de Nueva York, Illinois, California, Oklahoma, Georgia y Arkansas.
“Me fui cuando tenía 16 años, a buscar el sustento porque había la necesidad de estabilizar a la familia. Llegué primero a Illinois, ahí trabajé de lavaplatos; después, en 1980, llegué a Nueva York, pero a los seis meses me deportaron. Regresé a mi pueblo, pero la carestía de la vida era fuerte y decidí otra vez cruzar; trabajé como cocinero en un restaurante, propiedad de unos griegos. Después, en 1983, obtuve ya mi residencia permanente”, señaló.
Patrones "negreros"
En 1985, volvió a La Ciénega donde se casó con la novia que había dejado en el pueblo, aunque después fue con ella al país vecino, donde procreó tres hijos.
“Como mi esposa no tenía papeles, la pasé de mojada. Allá hicimos familia; nacieron mis hijos Liliana, Jeniffer y Manuel, quienes cuentan con la doble ciudadanía. No me gustan los Estados Unidos; estuve por necesidad, el trabajo es difícil, pesado y los patrones son injustos, como popularmente se dice 'negreros'; entonces, como había cumplido mi meta, decidí regresar en el 2001 y abrí un negocio, además de que ya tenía una lesión en el hombro causada por el trabajo. Sin embargo, todavía hay muchos paisanos por allá que siguen trabajando y sufriendo”, asentó.
Propuesta de campaña
Ahora, ante el reciente triunfo electoral de Donald Trump, muchos de esos migrantes de este municipio sufren actos de racismo y están en riesgo de ser deportados masivamente por el entrante presidente de los Estados Unidos.
“Desafortunadamente, Trump despertó el racismo que sufrimos muchos de nosotros; cuando íbamos caminando en las calles nos aventaban globos con orines. De la deportación, estoy casi seguro que es una mera propuesta de campaña política porque él ha contratado a muchos mexicanos en sus restaurantes y hoteles. Y en caso de que los deporte ¿quién va a hacer ese trabajo”, terminó.
“Soy ciudadano estadunidense, tengo 17 años, nací en Aurora, Illinois, pero me siento más mexicano. Tengo un mes de haber llegado, estudio en el décimo grado en high school y trabajo también en una lavautos, aspirando los interiores. Creo que el señor Donald Trump dijo todas esas cosas para ganar fama y así llegar a la presidencia de los Estados Unidos; si el Congreso, que es el que manda allá, le niega su autorización para hacer todo lo que quiere hacer, no podrá deportar a los migrantes. Además, sería sorprendente que deportaran cuando el país se ha formado de migrantes”.
Ricardo Celaya
Mexico-estadunidense
“Como todo político, Trump buscó la manera para llegar al poder, aunque lamentablemente su campaña política ha generado una mayor discriminación y racismo contra los migrantes, especialmente los mexicanos. Sin embargo, creo que el Congreso no respaldará esas promesas de campañas tan agresivas; cuando Barack Obama fue candidato, prometió que iba a otorgar permisos de trabajo, pero no cumplió porque el Congreso no le dio su apoyo. De lo contrario, a muchos mexicanos, como mi hermano Jorge, que tiene allá más de 20 años, les va a ir mal”.
Oscar Celaya Cruz
Exmigrante oaxaqueño
“Ahora que llegue a la Casa Blanca, Donald Trump dice que va a correr a la gente, porque él manda, pero el Congreso es quien dice sí o no. Si saca a todos los mexicanos y a los migrantes de los demás países, Estados Unidos seguramente irá a la quiebra; puede haber hasta una tercera depresión”.
José Ángel Pérez Ortiz
Exmigrante oaxaqueño
