El ciclista oaxaqueño Pedro Martínez Ramos vivió una aventura inolvidable como parte de la expedición en bicicleta denominada México-Centroamérica 2016 (MAC 2016), que comenzó el 11 de febrero en la ciudad de Oaxaca de Juárez, Oaxaca, México, y finalizó el cinco de mayo en Panamá, Panamá.
Martínez Ramos, quien en la década de los años 80 y principios de los 90 militó en algunos de los mejores equipos de marca del país en ese entonces -como Hermanos Correa, Windsor e IMSS Unidad Morelos-,prestó sus servicios como guía en el turismo de aventura.
52 ciclistas afiliados a la Federación Francesa de Cicloturismo realizaron un recorrido de aventura en la denominada Ruta México-Centroamérica 2016, con aproximadamente seis mil kilómetros de travesía por carreteras, caminos y trayectos a campo traviesa, con una duración de casi tres meses, en el que recorrieron ocho países: México, Belice, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Honduras, Costa Rica y Panamá.
Durante la travesía fueron 77 días de andar en bicicleta y 17 para el descanso y visitas turísticas. Pero no todo fue un viaje de placer, ya que hubo incidentes y accidentes que provocaron algunos cambios en lo planeado, que terminaron por mermar el grupo y de los 52 ciclistas que partieron de la ciudad de Oaxaca de Juáre. Sólo 48 llegaron a la meta en Panamá, Panamá.
Un proyecto increible
Recordar es volver a vivir... Y es que al reincorporarse a su actividad normal en su natal ciudad de Oaxaca, Pedro Martínez Ramos reconoce la MAC 2016 le dio la oportunidad de vivir un proyecto que no estaba en sus planes, en el que convivió durante casi tres meses con gente de una cultura diferente, en el que tuvo la oportunidad de conocer lugares naturales, arqueológicos, grandes ciudades y pequeñas poblaciones; así como comida diferente: "Eso sí, en México somos privilegiados con la gran variedad de comida y sabores que tenemos. Extrañé el picante y las tortillas", comentó al tiempo que dejó escapar una carcajada.
Mencionó que durante los 22 días de travesía por México, él rodó en bicicleta como guía del grupo de ciclistas con edades de entre los 48 a los 78 años; pero al terminar el recorrido en la República Mexicana, por cuestiones de salud, el chofer que llevaba la camioneta con maletas y otros utensilios para el viaje, tuvo que regresar a casa, por lo que a partir de ese momento, Pedro Martínez Ramos tomó el volante para acompañar la caravana hasta Panamá, en una labor que combinó con brindar apoyo a los paseantes y darle servicio a las bicicletas para que pudieran estar en buen estado.
Caídas que mermaron el grupo
Pedro Martínez Ramos consideró que, a pesar de la edad de los ciclistas de la Federación Francesa de Cicloturismo que cubrieron la Ruta MAC 2016, son personas con gran fortaleza que saben a lo que van y disfrutan del recorrido.
"Es gente que en su mayoría ya está jubilada, que cuentan con solvencia económica como para viajar en avión o en autobuses de lujo, hospedarse en grandes hoteles y comer en buenos restaurantes, pero su proyecto de vida es diferente. Y llegué a la conclusión que ellos han tomado esa decisión sí para viajar y conocer lugares y culturas diferentes, pero también para sentirse vivos y seguir activos con constante ejercicio arriba de la bicicleta", consideró Pedro Martínez Ramos.
Todos los días había que levantarse a las 4:30 de la mañana, desayunar a las 5:30 y estar listos para la salida a las 6:30. Entre las 12:30 y las 13:00 horas había un descanso para comer. Después de eso había que continuar con el recorrido, Regularmente cada etapa concluía alrededor de las cuatro de la tarde, pero hubo ocasiones en que, por algunos imprevistos, la jornada fue más larga, por lo que ya entrada la noche llegaban al lugar planeado para alojarse y descansar.
Durante la ruta hubo tramos en carretera; otros por caminos de tierra, y otros más a campo traviesa por montaña. Y a lo largo de los casi seis mil kilómetros hubo caídas, una de ellas, quizás la más fuerte, estando aún en territorio mexicano, ya casi para llegar a la zona arqueológica de Palenque.
Había llovido y la carretera estaba mojada, un señor cayó y se fracturó la pelvis. Otra señora también cayó y se rompió la costilla. Su esposo, quien también iba en el grupo, tuvo que desertar y en esa misma jornada hubo tres bajas.
Más adelante, ya en Managua, Nicaragua, una mujer inglesa que formaba parte de un grupo de la Federación Francesa de Cicloturismo, se sentía muy cansada e incómoda; así que que tomó la decisión de abandonar, quedando sólo los 48.
Pieza clave en la MAC 2016
A pesar de que por momentos la travesía se complicó, el ciclista oaxaqueño, Pedro Martínez, confesó que por su cabeza nunca pasó la idea de abandonar el proyecto: "Más bien siempre pensé que era una experiencia diferente. Yo fui a trabajar, y desde que comenzó el proyecto le puse mucha dedicación, con el interés de que todo saliera bien".
Durante el viaje, en más de una ocasión, el jefe del proyecto, el francés Michel Cabart, se acercó al oaxaqueño para preguntarle cómo se sentía y si se estaba incómodo, porque tuvo que convertirse en chofer; y además siempre auxilió a la gente del grupo, checó el vehículo y las bicicletas, a fin de que llegara a buen puerto el proyecto MAC 2016.
"Al final fue importante que todos hayan reconocido que nuestra labor fue pieza clave en la realización de la Ruta MAC 2016", señaló Pedro Martínez.
Después de tres meses de recorrido, fue verdaderamente emocionante llegar a Panamá. Parece fácil al decirlo y trazarlo en un mapa, pero no fue así, ya que no fue una travesía directa; fue un viaje lleno de aventura, en el que recorrieron ocho naciones: México, Belice, Guatemala, El Salvador, Honduras, Costa Rica, Nicaragua y Panamá.
Pedro Martínez recordó que casi al comenzar el viaje, aún en tierra oaxaqueña, un señor le dijo: "¿Oye, dónde piensas que vas a llegar con esos viejitos? Pues llegué a Panamá".
Respetan sus códigos
Después de ser parte de la MAC 2016, ya en casa, Martínez Ramos mencionó que hay muchas cosas que recordar: "Una tarde que nos quedamos en un pueblo en la montaña, ya en el país de Panamá, donde hay un proyecto de turismo rural, Los habitantes de ahí nos alojaron en unas cabañas, y a otros más en sus casas.
Y al irse a descansar en una cama de madera, el más grande del grupo, un señor de 78 años comenzó a pedir auxilio porque el lugar estaba lleno de hormigas. Al revisar el lugar se comprobó que la cama no tenía las hormigas, él las llevaba en las alforjas de su mochila, que con el sudor y alimento las había transportado.
Comentó que a pesar de la edad de los integrantes, hay códigos en el grupo que deben respetar. En una de las etapas, un señor se adelantó y se salió del control. Avanzó tanto que llegó a otro pueblo, donde lo retuvieron: "No estaba muy lejos y les dije que podía ir por él, pero no quisieron. Su misma esposa dijo que no; él se quiso adelantar, nos dejó, ahora que nos espere". Y así fue, sabían que él estaba bien y fueron por él hasta después de las siete de la noche.
Volverá la aventura para el 2017
La Federación Francesa de Cicloturismo ha realizado tres expediciones: en el 2008 recorrieron de París, Francia a Pekín, China; en el 2012 de Pekín, China a Londres, Inglaterra; y en el 2016 de Oaxaca, México a Panamá, Panamá.
Para el 2017 ya está el proyecto, será nuevamente de Oaxaca, México a Panamá, Panamá, informó Pedro Martínez Ramos, quien agregó, "ya ya estamos contratados para la MAC 2017".
Es un proyecto que gustó, y aunque será un recorrido diferente, ahora ya sabe cuál es la dinámica y cuáles son las necesidades, por lo que Pedro Martínez ya está dispuesto a vivir otra aventura en bicicleta.
Ruta MAC 2016
Inició 11 de febrero en Oaxaca, México
Finalizó 5 de mayo en Panamá, Panamá
Salieron de Oaxaca 52 ciclistas
Terminaron el recorrido 48 ciclistas en Panamá
Edades de los participantes: 48 a 78 años
Recorrieron ocho naciones: México, Belice, Guatemala, El Salvador, Honduras, Costa Rica, Nicaragua y Panamá
