Manuel de Cisneros ha llevado su pasión por la música y las tornamesas a sus obras, al menos en el título y la referencia de los lados B de los vinilos. Estas versiones largas y apreciadas por los DJ reflejan lo que él considera sobre la técnica que actualmente está utilizado en su obra. Recién expuso en la Galería Quetzalli ocho cuadros en gran formato, elaborados con bolígrafo.
Acerca de esta faceta, transitoria como toda exploración, De Cisneros, en entrevista reveló que esta técnica no es tan común como para ponerla en formatos grandes y sabe que podría ser menospreciada porque no es comercialmente atractiva: “No tiene color, no pertenece a la técnica de la gráfica, aunque es dibujo, pero no es óleo tampoco. Podría ser hasta menospreciada, pero es la necesidad que yo tengo de hacerlas en este momento.”
La exposición que presentó recientemente se tituló Lado B y sobre llamarla así apuntó que es por su oficio de DJ, durante las décadas de los 80 y 90. Sabe que los vinilos traen dos versiones y el Lado B era el que se utilizaba menos en fiestas comerciales, en las que se priorizaban solo los éxitos, pero el otro lado presentaba versiones alternativas que suelen ser reflejo de calidad y persistencia.
“Los lado B se utilizaban menos y a veces hasta en el underground, dependía del criterio del DJ lo ponerlas. En mi casa tengo mis tornamesas y mis discos; con esta experiencia, sé que el lado B poco se aprovechaba y por eso mismo quise titular así la exposición, porque no es óleo, sino un bolígrafo que todo mundo utiliza para su anotaciones y demás”.
Para Manuel de Cisneros resulta atractiva esta técnica y está seguro de que tras la muestra que permaneció cerca de dos meses en la Quetzalli, seguirá trabajando con bolígrafo. “Estoy en el punto de hacer estos cuadros. El óleo estará siempre porque es la técnica que más me gusta y me llena, pero el proceso creativo ahora es este, más adelante cambiará, el propio trabajo y los temas siempre te llevan a algo más”.
Sus obras: un reflejo de sí mismo
De Cisneros habla de los personajes, que expresan sentimientos como dolor, angustia, soledad y pérdida, mismos que suelen ser reflejo de etapas en la vida de muchos productores del arte. Tal cual, el pintor acepta que es así y que se trata de expresiones faciales y posturas de seres que caen estrepitosamente, pero que se sostienen mediante estos hilos que declaran una persistencia a mantener la esperanza, el deseo, la confianza y el mismo amor.
“Estos personajes, inconscientemente quizá nazcan de mí. La gente me ha dicho que yo soy esas personas que dibujo, quizá que pongo cosas físicas mías ahí, quizá utilizar mi nariz, mis labios, las entradas de mi cabello… quizá me voy reflejando.”
También comparte la idea de que el arte tiene siempre algo de autobiográfico. Y considera que es muy normal: “todos los días te ves desnudo, te palpas, te ves, no necesitas poner a otra persona frente a ti para dibujarla, uno puede moldear sus cuerpos como quiera, en su obra. No necesitas modelos, el modelo es uno mismo”.
Manuel comparte que a lo largo de su oficio en el arte, sus personajes han sido una constante crítica interna, del propio ser, una suerte de espejo. Para él pintar o dibujar es una especie de terapia, porque cada que uno pinta es llevarse a terapia, se deboca en cada lienzo o papel y lo interno se externa, en una necesidad de vaciarse.
El uso del bolígrafo también es como una pausa de la salud, refiere: “como artista tanto tiempo de estar inhalando solventes llegas a tener problemas, esta es una pausa para mis pulmones y mi cerebro. Al principio no lo pensaba así, pero uno va madurando.”
LA FRASE
“Mi obra ha sido una crítica interna, del propio ser humano. Mis cuadros son un espejo, habrá quien se identifique y quién no. El arte es una terapia”.
Pasa saber:
El empleo del bolígrafo para la producción de estos cuadros llevó a de Cisneros a plantear que la obra en sí misma no vale por los materiales con los que se produce, sino por lo que logra expresar, por las emociones que revive, por los recuerdos que evoca o por las interrogantes que despierta en el espectador.
+DE
Manuel de Cisneros (23 de febrero de 1970. Oaxaca, México).
EXPOSICIONES INDIVIDUALES
2002 Retratos de familia. Galería Rodolfo Morales. Centro Cultural «Ricardo Flores Magón» ISSSTE, Oaxaca, Méx.
2003 Luna para Claudia y otras historias. Galería Rufino Tamayo. Casa de la Cultura Oaxaqueña. Oaxaca, Oax., Méx.
2003 Historias sin tiempo. Museo Regional de Huajuapan de León, MUREH. Huajuapan de León, Oaxaca, México.
2005 Estaciones. Galería Quetzalli. Oaxaca, Oax., México
2006 Cuadernos. Espacio alternativo A.R.T. galería. Oaxaca, Oax., México
2007 Ventanas. Universidad Autónoma Metropolitana. Distrito Federal., México
2008 Murky season. Bonney-Tannock Art Enterprises. Victorian Artists Society. Melborne, Australia
2009 Paisajes. Galería Martha Flores. Monterrey, Nuevo León.
2010 !A diario¡ Galería Setba, Zona d’Art. Barcelona, España.
2012 Diario Estación de Magoria. Barcelona, España.
2013 Exposición pictórica. Palacio Federal de Puebla-Galería Cero. Puebla, Puebla.
2014 A dos de tres caídas. Arena Puebla de Lucha Libre (CMLL)- galería Cero. Puebla, Puebla.
RECONOCIMIENTOS
1991 Beca de la Pasadena Art Comission para la exposición colectiva en dicha ciudad.
1994 Beca «Jóvenes Creadores» del Fondo Estatal para la Cultura y las Artes (FOESCA)
2008 Taller de Pintura de Creación, Escuela Massana . Barcelona, España, Período enero-mayo del 2008
2012 Residencia en Barcelona, España, Periodo marzo-julio del 2012.
