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Celebran el VII Festival de Tamboreros Tecuanes

Foto(s): Cortesía
Redacción

HUAJUAPAN DE LEÓN, Oaxaca.- Mixtecos del estado de Puebla realizaron el VII Festival del Encuentro de Tamboreros de Tecuanes, en donde se rescatan las danzas de la región; aquí sobresale la cacería y muerte prehispánica del jaguar en  esta parte de la demarcación.


Este séptimo encuentro tuvo como sede el municipio de Acatlán, ubicado en la región Mixteca del estado de Puebla, en donde 30 tamboreros procedentes de comunidades indígenas tocaron los sones de las danzas de los Tecuanes; en este festival se rindió un homenaje a uno de los embajadores de esta danza a nivel internacional.


Honor a quien honor merece


El homenajeado en este festival fue el tamborero Max Castelán, quien con 35 años de trayectoria se ha convertido en un icono entre los diferentes grupos de Tecuanes, pues ha logrado llevar este arte a los Estados Unidos, en donde cientos de migrantes participan en este intercambio cultural que tiene celebrándose más de tres décadas.


Eric Castillo Bravo, quien es tamborero desde hace varios años,  dijo que el homenaje que le rindieron  a Castelán es por la trayectoria que tiene,  además de que se ha vuelto un icono en la danza de los Tecuanes,  pues, en la mayoría de las ocasiones ha interpretado a el jaguar, por lo que conoce el misterio de la música y la representación de una de las obras artísticas más importantes de la región Mixteca Poblana.


El también coordinador de este evento, afirmó que los 30 tamboreros que participaron en el encuentro interpretaron los 36 diferentes sones de Tecuanes, que son la mezcla de música, interpretada por una persona, quien al mismo tiempo debe tocar la flauta de carrizo y el tambor, el cual sostiene ayudado por una cuerda.


El arte del tamborero, que ha acompañado la tradicional danza con sus místicos bailetes desde 1890, busca trascender a las nuevas generaciones, por lo que este año se pudo apreciar la actuación de músicos desde los ocho años de edad.


El propósito


Sostuvo que este encuentro toma gran importancia,  ya que debido a la migración de las comunidades indígenas de la región Mixteca del estado de Puebla,  la danza de los Tecuanes estuvo a punto de desaparecer hace algunos años, por lo que los músicos tradicionales tomaron como propósito el rescate de este arte, el cual es enseñado a las nuevas generaciones.


Cabe recordar que la Danza de Tecuanes representa a dos tribus o familias, confabuladas para “trampear” al tigre o jaguar, elemento mítico para las culturas prehispánicas como es la Mixteca, y el cual dentro de la danza representa al personaje que ha dañado a sus ganados y propiedades.


Los danzantes bailan al ritmo de 36 sones, entre los cuales destacan: Culebra, Zapateado, Enanos, Cucaracha, Borracho, Rodillas, Hombros, Sembrador, Bandera, Liebre, Iguana, Sarna, Capotín, Capitaneja, Cruzado, Corte de caña, Panadero, Corral, Chande, El Toro y La Muerte del Tecuan.


Herencia cultural


La danza de los Tecuanes es un baile tradicional que se ejecuta  en los estados de Guerrero y Puebla , la cual representa el trabajo de los campesinos en la siembra y su lucha contra el jaguar, que significa --pantera onca--  o en náhuatl océlotl o tecuani y en español se lee “el que come gente” y su nombre en maya es “balam”.


Los tecuanes fingen primero dedicarse a sus labores, después narran las tropelías del jaguar, haciendo jocosas alusiones improvistas sobre gente conocida del pueblo, que provocan gran regocijo entre los espectadores, y se inicia la búsqueda del animal hasta que es localizado, entonces sucede el hecho fulminante: la cacería y muerte del tecuani.

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