Alejandro José Ortiz Sampablo
¿Has observado que no soltar es una situación común que se puede palpar en el carácter de nosotros los mexicanos?
La imposibilidad a la renuncia, algo a explicar
Nos cuesta dejar ir a la pareja, a pesar de no estar a gusto en la relación, en el menor de los casos; abandonar viejos hábitos, aun cuando causan estragos en la vida cotidiana, incluso en la salud; cambiar de trabajo pese a no te haga feliz o no te brinde la economía que te permita una vida digna; permanecer en una licenciatura que no cumple tus expectativas, aunque cada día tengas ganas de renunciar, incluso a la vida.
Sin duda con el descubrimiento realizado por Sigmund Freud, de los segundos pensamientos como los llamo en un primer momento, los fenómenos mencionados pueden explicarse. Pues para ello basta con hacer hablar a quien lo adolece. Existe un fenómeno psíquico que conserva de manera pura una cualidad que permea en los anteriores.
Éste es un hábito que sobresale de manera ostentosa en algunas personas, lo vemos en la vida cotidiana de hoy en día, es la acumulación patológica que en casos más severos llega a tomar dimensiones espectaculares, incluso ha dado pie a toda una serie televisiva al respecto. Sin embargo, todo exceso tiene un inicio, o mejor dicho una raíz, ¿cuál es esta?
Cuidado con escupir para arriba
Posiblemente conozcan a alguien que se le dificulte tirar los recipientes que viene con el pastel de la fiesta, los frascos de la mayonesa o el café, las libretas usadas por los hijos en la primaria; ejemplos hay muchos, al igual que la justificación que dichas personas arguyen, algunas suenan sensatas. Por otro lado, existen individuos que cierran sus puertas a los ojos del mundo y crean espacios en los que a ellos mismos se les dificulta transitar por la acumulación de enseres, medicamentos caducos, publicaciones descontinuadas, papelería varia y aparatos descompuestos, entre otros cachivaches.
Todos estos trastes se acumulan con la peregrina idea de que algún día podrían ser necesarios; habrá que ver la cara de triunfo del acumulador cuando un clip que recogió del suelo hace tres o cuatro años sirve para sujetar una carpeta con documentos el día de hoy. Puedo aseverar que toda casa mexicana tiene un cuarto de cachivaches y una vitrina con artículos intocables, aunque por supuesto no todos los casos de acumulación llegan a la expresión mórbida.
En el plano emocional tendemos a guardar en la memoria afectos y sensaciones, es parte de la naturaleza humana; lo que intriga es cómo el ser humano guarda con especial ahínco afectos y sensaciones que le causan estados de angustia, enojos, miedo, celos y en especial cómo tiende a acumular rencores.
Y tú, ¿qué acumulas?
¿Quieres saber más? Pide informes a los teléfonos 951 244 7006/951 285 3921 y ¡Hazte escuchar por un psicoanalista del INEIP A.C.!
¡Acompáñanos! el miércoles 8 de diciembre en punto de las ocho de la noche en la transmisión de Una Ilustración de la vida amorosa por Facebook Live en la página del Instituto.
