Israel García Reyes
Hoy investigadores de la Universidad Miguel Hernández de España dieron a conocer que crearon un implante cerebral basado en microelectrodos intracorticales, que estimula la visión y es capaz de inducir la percepción de formas y letras en una persona ciega a través de una cámara, revolucionando al mundo de la ciencia.
El implante cerebral logra estimular la visión y hacer percibir distintas formas a personas invidentes: a través de pequeños electrodos que penetran en la corteza cerebral y se combinan con una cámara, el dispositivo logra que personas invidentes perciban letras e incluso la silueta de objetos en su entorno.
Un artículo publicado en R&I World explica que la introducción de este microdispositivo en el cerebro humano se puede efectuar de forma segura, generando la estimulación directa de la corteza cerebral y produciendo percepciones visuales que alcanzan una resolución mucho mayor a la obtenida hasta el momento con otros métodos.
Pruebas en animales
El grupo de especialistas había desarrollado un experimento similar estimulando la corteza visual de primates no humanos. En ese momento, un implante cerebral con más de 1,000 electrodos hizo posible que los animales puedan ver formas o percibir movimientos, pero sin tratarse de ejemplares ciegos.
Sin embargo, la nueva investigación se sustenta en la implantación de los microelectrodos en el cerebro de una persona absolutamente ciega desde hace más de 16 años. Se trató de una voluntaria de 57 años de edad que fue capaz de reconocer letras y percibir la figura de determinados objetos gracias al implante cerebral.
Características del implante
Se trata de un dispositivo de cuatro milímetros de ancho y consta de una matriz tridimensional con 96 electrodos de 1.5 milímetros de largo cada uno que se implantan directamente en la corteza visual. Estos electrodos se comunican con las células cerebrales de forma bidireccional: registran señales eléctricas y estimulan al cerebro. Las características del dispositivo permiten que no afecte la función general de la corteza cerebral ni de aquellas neuronas que se ubican cerca del implante.
Asimismo se colocó una retina artificial en forma de cámara que simula el funcionamiento del sistema visual humano, capturando el campo visual que se encuentra frente a la persona y convirtiéndolo en corrientes de impulsos eléctricos. De este modo se estimulan las neuronas de la corteza visual, mediante la actividad de los microelectrodos, lo que restaura la visión de manera parcial.
FOTO: El Español
