Sólo un 20 por ciento de los productores de mezcal en Oaxaca, trabajan en la recuperación de las 20 especies de agave que se consideran en peligro de extinción.
El alto costo que genera buscar mecanismos que permitan reproducir las especies endémicas de Oaxaca, incide en que los productores sólo enfoquen recursos para mantener en producción el agave tipo espadín.
Carlos Núñez, productor de mezcal en Oaxaca, precisó que desde hace dos años se ha dedicado a recolectar semillas de especies endémicas.
“Primero tienes que recolectar las semillas y de ahi no todas te sirven al 100 por ciento, tienes que seleccionar para que te salga una buena planta, de ahí hay que llevarlo al proceso de nacimiento donde más o menos esperamos un 90 por ciento de éxito para poder cosechar y lo llevamos a un tipo de vivero y una vez que crezca se le lleva a su zona endémica”, explicó el productor de mezcal.
La competencia por mantener la producción de mezcal por encima del tequila, obliga a los productores de mezcal a reproducir en mayor cantidad las especies tipo espadín y tobalá.
Sin embargo los agaves tipo cuishe, madre cuishe, sierra negra y coyote por mencionar algunos mantienen baja productividad.
“Es un tema que preocupa porque si el mezcal se posiciona por encima del tequila, tenemos que preocuparnos por aquellos que están en peligro y ver la manera de rescatarlo, sin invadir el proceso natural de crecimiento de la planta”, añadió.
Seguro del trabajo que realizan diversas universidades en Oaxaca y del centro de país, aseguró que ninguna especie, al menos de Oaxaca, desaparecerá gracias a nuevos procesos de reforestación.
