Su sabor es considerado exquisito y es muy elevado su valor en el mercado. Se trata de las chicatanas (hormigas), el platillo exótico de los oaxaqueños al que se le atribuyen propiedades afrodisiacas.
Los precios por kilogramo llegan a mil o mil 200 pesos, y botecitos con menos de 250 gramos se expenden en 100 y 200 pesos. FOTO: Mario Jiménez Leyva
Con las lluvias de temporada en los meses de junio, julio, y en ocasiones en agosto, las chicatanas o arrieras reinas emergen de la tierra, de sus hormigueros o nidos, en el que permanecieron todo un año tras dejar sus huevos y tomar el tamaño que conocemos.
En el amanecer, entre las 4 y 6 de la mañana, se realiza la colecta de los insectos, niños y adultos por igual, se amarran bolsas en los pies para evitar las picaduras, e inician la caza.
El alto contenido en proteína, hace de este insecto un blanco interesante por parte de laboratorios estadounidenses para elaborar alimentos que permitan atender la desnutrición infantil.
Los Beneficios de las Chicatanas
Tienen bajos niveles de grasas saturadas.
Poseen propiedades antibacteriales.
Son fuente de proteínas.
Ayudan en el tratamiento de la artritis reumatoide.
Se dice que son afrodisiacas.
¿Qué son las chicatanas?
Las chicatanas son hormigas arrieras reina, pertenecen a las especie de Atta Mexicana y A. Cephalotes. Solo salen una vez al año, precisamente en temporada de lluvias, por eso, su valor en el mercado es excesivo, hasta mil o mil 200 pesos el kilogramo.
Las chicatanas solo surgen una vez al año, durante la temporada de lluvias. FOTO: Mario Jiménez Leyva
Regularmente se encuentran en los mercados populares de la capital, Benito Juárez o Mercado de Abastos, en el primero encuentras botecitos de 50, 100 o 200 pesos, lo que sería menos de un cuarto de kilo. En el Mercado de Abastos se encuentran canastos llenos del insecto y la medida, casi un cuarto de kilo cuesta hasta 150 pesos.
Según cuenta, Julio Cortés, quien se dedica a la captura, preparar y vender el insecto en el Mercado de Abastos, las chicatanas emigraron de Colombia al sur de México, se establecieron en Chiapas, Guerrero y Oaxaca, donde regularmente la emplean para el consumo humano.
En el estado la especie predomina en regiones como la Costa, la Mixteca y los Valles Centrales, regularmente en lugares húmedos.
Las chicatanas que el señor Costés expende las trae de los Loxichas, el lugar ideal gracias a su humedad constante, las hormigas reina salen en grandes cantidades, pues de esta zona han logrado recolectar varios kilos.
Julio, es un expendedor de chicatanas en el Mercado de Abastos desde hace 30 años. FOTO: Mario Jiménez Leyva
En Valles Centrales
También en municipios como San Antonio de la Cal, Valle de Etla, en Juchitán y otras localidades se captura la hormiga.
En la región de la Mixteca se tiene la creencia de que la aparición repentina del insecto debajo del fogón o metate es señal que la muerte ronda a la familia, sobre todo si se encuentra un hormiguero debajo de la casa. Algo similar como la creencia de que las mariposas negras de gran tamaño es señal que la muerte está cerca, que aparecen en el hogar.
Dice que es preocupante que este año no hayan surgido muchos insectos, y eso es un síntoma que la mancha urbana va creciendo y abarcando los espacios a la naturaleza, aunque el insecto no necesita más que un pedazo de tierra para anidar.
Un manjar de la gastronomía oaxaqueña
Don Julio describe el sabor del insecto como algo exquisito.
Sabe a hierbita, a tierrita, no sé cómo describirlo pero sabe delicioso, su sabor no se parece a los chapulines, es mucho más rico.
Su sabor es exquisito, dicen quienes la consumen en diferentes tipos de platillos. FOTO: Mario Jiménez Leyva
Hay personas que compran de diario una medida porque les gustan prepararla en salsa, sobre todo porque hasta el año entrante podrán de nuevo adquirirlas.
Su consumo ha trascendido fronteras, pues incluso paisanos que radican en los Estados Unidos las demandan para poder preparar los platillos qué, para mucho, son un manjar.
Buscan crear alimentos para combatir desnutrición
Julio Cortés detalla que no solo el sabor de las chicatanas han llamado la atención en el interior del país, también en los Estados Unidos, ya que un grupo de ciudadanos americanos llegó a la entidad y realizó una serie de estudios al insecto para conocer sus propiedades.
Los estudios se concretaron en Anresco Laboratories en San Francisco California y ahí confirmaron que la chicatana contiene 35% de proteína, mucho más que el aporte de los chapulines que alcanzaron el 27% de proteína.
Ahora, menciona, este grupo de norteamericanos busca concretar un proyecto de elaboración de alimentos a base de hormiga, que permita atender la desnutrición en menores de edad, sobre todo en países que sufren de hambrunas.
Julio indica que, a través de un proceso correcto de deshidratación, el insecto se puede conservar hasta un año; el comerciantes asegura que ha logrado acumular hasta media tonelada del insecto que lo vende poco a poco en su puesto.
“Los oaxaqueños somos bendecidos, tenemos todo tipo de clima y la naturaleza nos ha regalado gran diversidad para que la aprovechemos, pero a su vez las conservemos”.
Un grupo de especialistas norteamericanos realizó un estudio para conocer las propiedades energéticas de las hormigas. FOTO: Mario Jiménez Leyva
¿Cómo se prepara?
Una vez que se tiene el insecto se le cortan las alas, la cabeza y se lavan, ahí inicia su preparación que es diversa y sencilla, comenta Josefina Crespo García; la mujer, sin poder resistirse, toma dos o tres insectos para llevárselos a la boca.
Puede ser en salsa de molcajete cuyos ingredientes son ajo, chile seco y por su puesto las chicatanas. La salsa acompaña a una tortilla recién bajada del comal con un pedazo de queso o huevo y es deliciosa, describe.
Pero también puede prepararse en salsa de carne de puerco, mole, tamales, o simplemente asadas con un poco de sal y ajo.
